La ruta de senderismo del río Donsal no decepciona
Naturaleza pura, vegetación variada, silencio y el leve murmullo del agua, te acompañarán durante 18 kilómetros.
Dado el interés despertado por mi artículo de la pasada semana sobre la Ruta de senderismo del río Donsal, PR-G 159, situada en el entorno de los Ancares lugueses, añadiré alguna información.
Su trazado y preparación ha corrido a cargo de la Asociación Castaño y Nogal, con recursos propios, unas escasas ayudas públicas en infraestructuras y la participación de un grupo de más de 75 voluntarios de 17 países y algunos cooperantes, que han trabajado durante 9 campos internacionales de verano, organizados por la asociación.
La ruta no es circular, importante puntualización para los futuros senderistas. A lo largo de sus 18,2 km. de recorrido se puede acceder a ella en diversos puntos –O Couso, comienzo, Quintá de Cancelada, A Moa, Sevane, A Cortella, Buisán y Cabana, donde finaliza–, lo que permite acomodar la duración de la caminata, a la edad, compañía de niños, experiencia o tiempo disponible.
Desde la ciudad de A Coruña hasta el lugar de inicio de la ruta hay 150 Km., todos por la A-6, excepto los 20 últimos; desde Madrid, 462 km por la A-6 hasta Becerreá, a los que hay que añadir 20 km. hasta el comienzo de la ruta.
Para quienes dispongan de un fin de semana completo, existe la posibilidad de llegar hasta la sierra de Ancares –33 km. desde Navia de Suarna– para visitar el núcleo prerromano de Piornedo con sus pallozas, contemplar las manadas de caballos salvajes y un paisaje espectacular libre de construcciones hasta el horizonte. Esta prolongación permitirá al senderista pernoctar en la villa de Navia de Suarna, disfrutar de su enxebre gastronomía y conocer su castillo y magnífico puente, cuya construcción se remonta al siglo XII.
En esta zona por la que transcurre la ruta del río Donsal, hay nueve núcleos de población que, en conjunto, no alcanzan los 160 habitantes, cuya media de edad se encuentra en torno a los 70 años. Resulta lamentable que las administraciones públicas hagan tan poco para hacer frente a un problema tan serio como el despoblamiento, que afecta a toda España y a Galicia de forma particular.
Si se dedicaran recursos para atraer hacia estos núcleos de población semiabandonados, a quienes viven de forma indigna en las ciudades, se estaría haciendo una importante labor, tanto económica como social. La notable mejora en las comunicaciones ha paliado los inconvenientes que suponía en otros tiempos el aislamiento de núcleos de población en lugares recónditos, pues hoy, en menos de una hora, es posible acceder a cualquier ciudad gallega desde el rincón más apartado y tener así acceso a toda clase de servicios. @mundiario
