La renuncia de Felipe VI a la herencia de su padre es meramente simbólica

felipe-vi-et-son-pere-juan-carlos (1) [640x480]
Felipe VI retira el sueldo a su padre.

El momento de renunciar es cuando se está en disposición de recibir la herencia, y ese momento no ha llegado. Ya veremos  que pasa en su día. ¿Se acordará alguien entonces de los españoles que sigan vivos? ¿Qué pasará con la fortuna inmensa de Juan Carlos?

La renuncia de Felipe VI a la herencia de su padre es meramente simbólica

El principio esencial de la “comunicación de crisis” consiste en elegir el momento de lanzar una comunicación obligatoria y que no se puede ocultar, porque sus efectos pueden ser peores. Esa información debe difundirse aprovechando y eligiendo el momento que otro acontecimiento de relieve oculte, palíe o anule sus efectos. La Casa Real nos acaba de ofrecer un ejemplo de libro de este recurso, comunicando a la nación que reconoce que el comportamiento del rey honorífico –que no emérito—no tiene nada de ejemplar y que caso de producirse en un ciudadano corriente podría llevarlo a la cárcel y al decomiso del ilegal fruto de su conducta.

Decía Churchill que, a veces, la historia es una sucesión de paradojas. No deja de serlo que cuando el país está en vilo por la extensión del “coronavilus”, la Casa Real lance un comunicado que no deja lugar a dudas en cuanto a reconocer las andanzas de Juan Carlos I, al que, por su modo de vida, antes y después de dejar la Corona, se ha calificado por sus frivolidades como el “Faruk” español. Pero si estamos asombrados por el comunicado, no lo estamos menos por sus afirmaciones si las cotejamos con el vigente Código Civil en la mano con respeto a sucesiones y herencias.

La renuncia a la herencia

La Casa del Rey ha anunciado este domingo que Felipe VI ha renunciado a la herencia de Don Juan Carlos "que personalmente le pudiera corresponder" y ha avanzado también que el rey emérito deja de percibir la asignación que tiene fijada en los Presupuestos de la Casa de S.M. el Rey. Primera cuestión, ¿de qué va a vivir ahora Juan Carlos I? O sea, que dispondrá de otros recursos.

¿Qué renuncia a la herencia? ¿Y cómo es eso? Veamos el Código Civil. Artículo 816 “Toda renuncia o transacción sobre la legítima futura entre el que la debe y sus herederos forzosos es nula, y éstos podrán reclamarla cuando muera aquél; pero deberán traer a colación lo que hubiesen recibido por la renuncia o transacción”.

Artículo 991: Nadie podrá aceptar ni repudiar sin estar cierto de la muerte de la persona a quien haya de heredar y de su derecho a la herencia.

¿Qué valor tiene esa renuncia o qué valor va a tener cuando Juan Carlos I fallezca? ¿Podrá o no podrá heredar Felipe V, cuando además será un acto privado del que podríamos no enterarnos? El momento de renunciar es cuando se está en disposición de recibir la herencia, y ese momento no ha llegado. La renuncia tiene un sentido, a mi entender, y salvo opinión mejor fundada, meramente simbólica. Ya veremos lo que pasa en su día. ¿Se acordará alguien entonces de los españoles que sigan vivos? ¿Qué pasará con la fortuna inmensa de Juan Carlos?

La fortuna de Juan Carlos I se cifra en 1.800, según The New York Times y en 1.700 por la revista económica Forbes. En el origen y proceso de acumulación de comisiones diversas por operaciones de alto nivel, incluidas las rentas del petróleo que se obtiene a través de Arabia Saudí.  Ahora aparece un personaje clave Álvaro Jaime de Orleans-Borbón, primo el ex rey Juan Carlos y amigo de Corinna zu Sayn-Wittgenstein. Es primo lejano del monarca y vive en Mónaco, comparte amistades, contactos y reuniones con los personajes de ese mundo. Juan Carlos acrecentó sus relaciones con su primo, cuando el rey honorífico mantenía su relación con Corinna. Ahora, tras la última revelación de The Telegraph, se sospecha que el primo del monarca sea su “hombre de paja”, como ya reconoció la propia Corinna, y actúe como testaferro. En septiembre de 2019, dos representantes de la Fiscalía Anticorrupción española -un fiscal y el jefe de la unidad de Policía Judicial de ese órgano- interrogaron en Londres a Corinna en relación con sus afirmaciones de que empresarios españoles pagaron una comisión de 100 millones de euros por conseguir el contrato de construcción del tren de alta velocidad de La Meca (Arabia Saudí).

El opaco asunto de las fundaciones

Felipe VI ha renunciado también "a cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonancia con la legalidad o con los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional y privada y que deben informar la actividad de la Corona".

Pero la pregunta subsiguiente es otra: ¿Por qué si el asunto de las comisiones y los negocios privados del rey honorífico, sus líos de faldas y los manejos financieros y comisiones, sobre todo por la renta del petróleo son historias viejas surge esto ahora?

La Casa Real, algo distraída, viene a decirnos que se ha enterado por los medios de las andanzas de Juan Carlos cuando inicia el comunicado de modo vaporoso al decirnos que su anuncio tiene su origen en:  "Ante las informaciones referidas a S.M. el Rey Don Juan Carlos, aparecidas hasta la fecha en distintos medios de comunicación, la Casa de S.M. el Rey quiere hacer constar”…..:

Y tras aludir a la ejemplaridad que Felipe V reclama para los actos de la Corona (bueno, su padre ya nos había dicho que la “Ley es igual para todos”) y en consecuencia: renuncia a la herencia de su padre, así como a cualquier beneficio (consecuencia de los actos de su padre) de carácter financiero de origen no lícito. Y ya de paso, le quita la paga al rey honorífico.

07 - La amante del rey de España [640x480]

Los medios internacionales trataron el asunto Corinna desde el primer momento

En el comunicado hay una parte especialmente importante, la referida a su ignorancia de que era beneficiario de la “Fundación Zagatka”, o sea que no se lo comunicaron, si bien curativamente también renuncia a sus rendimientos. En cambio, donde sí parece que fueron diligentes se refiere a la “Fundación Lucum”, dando cuenta de que el 5 de marzo de 2019, al tener conocimiento, “sin ninguna justificación documental”, por lo visto aquí las cosas se resuelven de palabra, de su supuesta designación como beneficiario de la misma, desde el momento en el que se produjese el fallecimiento de su padre, se adoptaron las medidas prudentes para distanciarse del asunto y negar todo conocimiento y relación con el caso. Y en el mismo sentido, mediante acto notarial se protocolarizó la carta a Juan Carlos I de que tampoco se aceptaba que los viáticos de la entidad citada recayeran en el futuro sobre su hija la princesa de Asturias.

Aparte de las renuncias, es especialmente significativo este párrafo, donde es fácil colegir que se reconoce que todos esos beneficios tienen un origen que el propio texto califica de modo inequívoco.

En el cuarto apartado se dice: “Asimismo, y en el mismo acto notarial, y además de lo anterior, manifestó no haber tenido conocimiento ni prestado consentimiento a participar, en nombre propio o en representación de terceros, en particular de su hija, en ningún activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad pudieran no estar en plena y estricta consonancia con la legalidad o con los criterios de transparencia, integridad y ejemplaridad que informan su actividad institucional y privada. Y en la hipótesis de que, aun sin su consentimiento ni conocimiento, hubiera sido unilateralmente designado como heredero, legatario o beneficiario en relación con cualesquiera activos inversiones o estructuras, manifestó no aceptar participación o beneficio alguno en dichos activos y renunciar a cualquier derecho, expectativa o interés que pudiera corresponderles en el futuro”.

Por lo visto, en la Familia Real no se habla de estas cosas. Resulta especialmente patético que se haga constar que el autor principal de este asunto, Juan Carlos primero le ha pedido a la Casa Real: “Que de las dos Fundaciones anteriormente citadas en ningún momento facilitó información a S.M. el Rey”. Los abogados del Rey honorífico procederán en el futuro con respecto a las informaciones sobre el caso.

Y, la guinda es recordar que “Que, tras su abdicación en junio de 2014, el 27 de mayo de 2019 anunció que en junio de ese año ponía fin a toda actividad institucional u oficial, retirándose completamente de la vida pública".

Aparece Corinna

Y por si nos faltaba alguien en este episodio de alcobas, bancos, comisiones, fundaciones, herencias y enredos, aparece de nuevo la amiga del Rey Juan Carlos Corinna zu Sayn Wittgenstein afirmando que desde 2018 “trató de informar a la Casa Real del abuso" que, según ella, ha estado sufriendo desde hace "ocho años", pero que "se hizo caso omiso" y no se tomó "medida alguna" para remediarlo. Su abogado precisó que se intentó hacerlo a través de la Embajada de España en Londres y la propia Casa Real. El "abuso" del que habla Corinna sería una campaña en su contra que, según asegura, comenzó en 2012 cuando salió a la luz su relación con Don Juan Carlos después del viaje que ambos realizaron a Botsuana, una situación de la que también dejó constancia ante notario en una declaración jurada en abril del año pasado.

Las_cintas_de_Corinna-Corinna_zu_Sayn-Wittgenstein-Juan_Carlos_I-Espana_321734064_86615619_1706x663 [640x480]

El episodio con Corinna todavía tiene cuerda larga

Y como se sabe, la señora esta ha anunciado que tiene intención de denunciar a Juan Carlos y al exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán (con el que se entrevistó en su día) ante los tribunales británicos por amenazas y el acoso que dice sufrir para que no revele secretos de Estado que, según ella, le acusan de tener en su poder, tal y como adelantaron sus abogados.

Lo más insólito es que después de todo esto, el PSOE se una a los partidos dinásticos y se niegue a abrir un debate en el Congreso de los Diputados y una investigación sobre este escándalo que afecta a la primera institución del Estado. @mundiario

Comentarios