Pérdidas de 1.157 millones en el BBVA hasta junio por el saneamiento en EE UU y las provisiones

Edificio del BBVA, conocido como La Vela, en Madrid. / Mundiario
Edificio del BBVA, conocido como La Vela, en Madrid. / Mundiario

Sin el ajuste de valoración de la filial de EE UU, el banco se anotaría un beneficio de 928 millones, un 62% menos que hace un año.

Pérdidas de 1.157 millones en el BBVA hasta junio por el saneamiento en EE UU y las provisiones

El Grupo BBVA ganó 636 millones de euros en el segundo trimestre, más del doble que el resultado registrado entre enero y marzo sin incluir el impacto del fondo de comercio de EE UU. Para el BBVA, sus resultados de BBVA entre enero y junio demuestran la fortaleza en el beneficio antes de provisiones o margen neto, que ha permitido hacer frente a saneamientos y provisiones para afrontar el impacto de la pandemia. Además, el control de los gastos de explotación le ha permitido mejorar el ratio de eficiencia en 3,89 puntos porcentuales en los primeros seis meses del año. Lo cierto es que el BBVA perdió 1.157 millones de euros hasta junio por el saneamiento contable en EE UU y las provisiones por la pandemia. 

El margen de intereses avanzó un 2% interanual en el segundo trimestre a tipos de cambio constantes (-9,8% a tipos de cambio corrientes) hasta los 4.097 millones de euros, según una nota del BBVA. En el conjunto del semestre, el margen de intereses alcanzó 8.653 millones de euros, un 4,5% más en términos constantes, frente al mismo periodo del año anterior (-3,2% a tipos de cambio corrientes). Las comisiones netas se vieron afectadas por una menor actividad minorista, especialmente en tarjetas, derivada del confinamiento por la pandemia. El Grupo BBVA obtuvo 1.043 millones de euros en concepto de comisiones netas en el segundo trimestre del año, un 9,5% menos en términos constantes (-16,9% en términos corrientes). Entre enero y junio las comisiones netas alcanzaron 2.301 millones (-1,7% en constantes, -6,8% en corrientes).

El margen bruto alcanzó los 5.561 millones de euros en el segundo trimestre, lo que supone un avance del 6,1% interanual en términos constantes (-5,7% en corrientes). En el conjunto del semestre, esta partida avanzó un 8,8% en constantes (+0,8% en corrientes) hasta los 12.045 millones de euros. Durante el segundo trimestre se produjo una fuerte contención de los gastos de explotación hasta 2.594 millones de euros, que supone una caída del 4,9% a tipos constantes (-12,1% a tipos corrientes) frente a un año antes. En el conjunto del semestre, los gastos de explotación decrecieron un -1,5% en euros constantes (-6,2% en corrientes), hasta 5.512 millones, frente a una inflación media del 4,7% en los 12 últimos meses.

El margen neto alcanzó 2.967 millones de euros en el segundo trimestre, lo que supone un incremento del 17,6% interanual a tipos de cambio constantes (+0,7% en corrientes). Entre enero y junio, el margen neto fue de 6.533 millones de euros (+19,2% en constantes, +7,6% en corrientes). Este crecimiento se explica por la buena evolución del margen de intereses y de los ROF, así como por el descenso de los gastos de explotación.

Sin el ajuste de valoración de la filial de EE UU, el BBVA se anotaría un beneficio de 928 millones de euros, un 62% menos que hace un año. El beneficio atribuido en el segundo trimestre ascendió a 636 millones de euros, un -40,5% menos interanual a tipos de cambio constantes (-49,5% en corrientes), tras incorporar las dotaciones relacionadas con la pandemia (644 millones de euros: 576 millones en saneamientos y 68 millones en provisiones). Este resultado es un 118% superior al beneficio atribuido del primer trimestre de 2020, excluyendo el deterioro del fondo de comercio de EE UU. En la cuenta acumulada del primer semestre, BBVA obtuvo un beneficio atribuido de 928 millones de euros sin tener en cuenta dicho deterioro (-57,8% en constantes, -62% en corrientes). Incluyendo este impacto (-2.084 millones de euros), el resultado atribuido de los seis primeros meses asciende a -1.157 millones de euros.  

 

 

Gracias al esfuerzo de anticipación de provisiones realizado en el primer trimestre, el banco ha percibido una mejora sustancial en el coste del riesgo, pasando de 257 puntos básicos en el primer trimestre, al 1,51% de abril a junio. La tasa de mora y cobertura, 3,7% y 85%, respectivamente, se mantuvieron en niveles similares al anterior trimestre.

En cuanto al balance y la actividad, la cifra bruta de préstamos y anticipos a la clientela (400.764 millones de euros) se incrementó con respecto al cierre del año anterior (+1,5% en términos corrientes, +6,9% en constantes, lo que equivale aproximadamente a 26.000 millones de euros), con incrementos principalmente en las carteras de banca mayorista (CIB) y de empresas. Los depósitos de la clientela (402.184 millones de euros) cerraron el semestre un 4,7% a tipos corrientes por encima de los saldos de diciembre, muy apoyado en la buena evolución de los depósitos a la vista, donde los clientes han depositado la liquidez dispuesta para hacer frente a la pandemia. Por último, en cuanto a liquidez, el Grupo BBVA mantiene una sólida posición, con un ratio LCR o ‘Liquidity Coverage Ratio’ del 159% a 30 de junio, y un ratio NSFR o ‘Net Stable Funding Ratio’ del 124%, ambos por encima del requerimiento regulatorio (100%).

Prioridades de BBVA en la crisis de la Covid-19

El Grupo BBVA mantiene las prioridades que se marcó al comienzo de la crisis de la Covid-19: proteger la salud de sus empleados, sus clientes y la sociedad en general; proveer de un servicio esencial en las economías en las que opera, y brindar apoyo financiero a sus clientes. Los empleados de BBVA han comenzado el retorno a los centros de trabajo de una manera gradual y prudente (en España y Turquía, principalmente) mediante una gestión de la crisis basada en datos. Se están gestionando los diferentes estadios de la pandemia en cada país a través de procesos homogéneos en todas las geografías para proteger la salud y la continuidad del negocio.

A cierre de junio, el 87% de las sucursales están abiertas, si bien se ha reorientado a los clientes hacia el uso de canales remotos y digitales mientras perdure el virus. La digitalización siguió acelerándose durante el segundo trimestre. Los clientes digitales suponen ya un 60% del total, y los clientes móviles, un 56%. En el segundo trimestre, las ventas digitales, medidas en unidades, alcanzaron el 66,0% del total. @mundiario

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