El partido Voluntad Popular llama a nuevas manifestaciones contra Maduro

Rosaura Valentini es la esposa del capturado líder opositor Yon Goicoechea, quien se encuentra en la cárcel por supuestamente portar explosivos y haber sido entrenado por El Imperio para detonarlos. Valentini no encuentra cómo explicarle a sus hijos de siete y cuatro años que su padre, de raíces vascas, fue capturado por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) y enviado a una cárcel donde purga por un delito que nunca estuvo ni cerca de cometer.

Valentini recuerda en un vídeo que su esposo fue detenido mientras conducía su vehículo. 14 miembros de la Sebin lo detuvieron cobardemente en las calles y, sin mostrarle una orden judicial o cualquier documento que respaldara su acción, lo subieron a uno de sus coches y se lo llevaron sin más. Goicoechea pasó dos días y medio en una prisión de 2x15 metros, sin iluminación y sin derecho a hacer ninguna llamada. "Había ido a comprar unos muebles... y desapareció. No sabíamos dónde estaba. En la cárcel nos dijeron que ahí no", recuerda Valentini con voz temblorosa.

La señora prosigue su relato al recordar que, posteriormente, lo presentaron ante el tribunal y montaron el dichoso crimen de los explosivos. "Es una terrible fabricación de pruebas. Esta vez ha sido contra mi esposo pero se lo hacen a cientos de familias en Venezuela, simplemente por querer un mejor país, democracia y libertad. La represión ha aumentado mucho", asegura. Al igual que Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López, Valentín clama por el apoyo de la comunidad internacional.

El referendo

El chavismo se las ha ingeniado de forma descarada para evitar el referendo revocatorio que pondría a fin a su época de barbarie y desfachatez. Con el Consejo Nacional Electoral (CNE) como uno de sus peleles, la administración de Maduro ha conseguido poner todos los obstáculos necesarios para que la oposición se retrase más y más en la celebración de la consulta popular.

El CNE ya dio fecha para la junta de firmas de la nueva fase del revocatorio. Entre el 26 y el 28 de octubre deberán juntar el 20% de las firmas del padrón electoral. Después de eso, la autoridad electoral tendrá 30 días para convocar a unas nuevas elecciones. "Técnicamente es viable este año", afirma Manuela Bolívar, diputada de Voluntad Popular. "La sociedad venezolana entiende que hoy por hoy el voto está en peligro en Venezuela. No solo el proceso revocatorio, sino sino las elecciones regionales y cualquier otro mecanismo. Los voceros del Estado dicen que no se puede ir a elecciones cuando la gente está pasando hambre. El Estado le está privando a la sociedad de poder ejercer el voto, el CNE limita hasta la elección de sindicatos. El voto como mecanismo es cercenado", añade. "El referéndum solo va a ser factible si hay movilización social, si hay organización pacífica, que es lo que teme el Gobierno. Después del 20% vamos a ver en Venezuela un gran movimiento ciudadano demandando un derecho fundamental que no solo es revocar sino votar", dice en un nuevo llamado a las calles.

No obstante, y cómo no podía ser de otra forma, el chavismo se está cargando hasta la Constitución con tal de evitar su caída. El CNE dictó que el 20% de las firmas no será específicamente a nivel nacional, sino regional, lo cual dificulta todo. De acuerdo a Bolívar, eso es sencillamente anticonstitucional. "Pero vamos a superar lo que se requiere. 2016 va a ser el cierre de una etapa muy dura para los venezolanos. Va a haber una agitación. El Gobierno quiere generar violencia trabando los mecanismos constitucionales", comenta.@hmorales_gt