Habitación 300: Cuando todos te señalan, ¿eres todas las perspectivas?

Fans.
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Nadie me cree que yo antes era tímida, no me recuerdan de cuando lo era. Ahora ya no...

Habitación 300: Cuando todos te señalan, ¿eres todas las perspectivas?

Sigo sin saber quién soy. ¿Quién soy? Resuena en mi cabeza el eco de un nombre a pleno pulmón, dentro de una rutina que silencia mis geniales pensamientos.

Quedan algunas fotos que hoy me enfurecen, tomadas bajo la orden de una mofa como norma de la casa que me daba de comer y a la que yo eructaba.

Comer es la una de las rutinas, a la mesa el silencio de la pordiosera alimentada.

Allí las comidas eran sagradas y agradecidas. Mamá dice que da gusto verme comer, que como como un pajarito. Con gusto escuchan todos mis súplicas, a las que ninguno lleva a puerto.

Y seguí sin saber quién era. Pasé de no saber quién era a temer lo que estaba siendo…

Nadie me cree que yo antes era tímida, no me recuerdan de cuando lo era. Ahora ya no… Ya no dejo que me hagan parodia en las fotos, sino que hago mueca. Lo que me duele es que perdí los lindos recuerdos. Es memoria selectiva, o precavida, me acuerdo de todo lo malo para que no vuelva a suceder.

Pero hay muchos miedos que conozco que pueden acudir, y ya diré lo que me pasa con la muerte que tanto miedo me da. La vida es un arma de doble filo: por un lado te hace sonreír, pero por el otro se te está clavando como la espina del pescado más aderezado y tragas por no llorar.


 

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