España recibe un 97,7% menos de turistas en su peor temporada en 100 años
No hay límites para una crisis que se expande con fuerza en todos los eslabones de la economía de España, que es uno de los países más afectados por la pandemia de coronavirus en Europa debido a su posición estratégica como centro financiero, empresarial y de turismo. Precisamente, esta última industria es la que le está generando serios problemas de flujo de caja al país, cuyo 10% del PIB nacional es generado por este importante sector.
Y es que junio pasará a la historia no solo porque se decretó el final del estado de alarma por el coronavirus, que dejó a la sociedad española en un estado de subsistencia y crisis socioeconómica muy marcada por el desempleo y la escasez de ingresos, sino también debido a que marcó el peor registro del siglo en cuanto a la entrada de turistas extranjeros, hasta 204.926 personas, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), un 97,7% menos en comparación con el mismo mes de 2019.
Quizás también te interese:
Los créditos a las empresas subieron un 6% en junio en medio de la ola de desempleo
Esto implica que con esa caída en el flujo de turistas, se registró una caída proporcional muy abrupta en el flujo de capitales con una pérdida estimada de 2.049 millones de euros, lo que repercute en un 10% del total de ingresos que le reporta el sector a la economía nacional; entre 160.000 y 200.000 millones de euros al año.
El organismo detalla en su reporte que, “como consecuencia, el gasto de estos turistas que entraron por las fronteras descendió un 98,6 % en el sexto mes del año, hasta dejar en caja solamente 133 millones de euros, cuando un año antes los 8,83 millones de visitantes foráneos registrados por el INE desembolsaron 9.696 millones”.
Entonces, el impacto de la contracción en el sector podría restar hasta un 20% en el PIB de España por trimestre y totalizar al final del año un pobre desempeño de -12% de recesión en el valor neto de la economía.
La pandemia ha neutralizado la movilidad social, tanto en lo económicamente esencial como en el consumo de la población destinado al ocio, lo que deja prácticamente paralizada a la industria del turismo español en la que ya la peor etapa de su historia desde que se tienen registros estadísticos. @mundiario
