La escritora valenciana Amparo Andrés Machí filoversa en los caminos de Nod

Amparo Andres Mochi. / crepusculario.blogspot.com
Amparo Andres Mochi. / crepusculario.blogspot.com

La escritora valenciana Amparo Andrés Machí ha reunido en el presente libro, publicado por Ediciones Evohé, dos obras poéticas diferentes pero complementarias: Filoversando en Nod y Versos cuánticos.

La escritora valenciana Amparo Andrés Machí filoversa en los caminos de Nod

La escritora valenciana Amparo Andrés Machí, también conocida por su pseudónimo literario Stelmarch, ha reunido en el presente libro, publicado por Ediciones Evohé en su colección Desván, dos obras poéticas diferentes pero complementarias, por un lado Filoversando en Nod, significativo título que alude a su dimensión metafísica y estética, y por otro Versos cuánticos, un conjunto de seis poemas que fue premiado en el certamen Voces Nuevas de la editorial Torremozas en el año 2006.

Amparo Andrés es una notable poeta que sabe aunar con sabiduría la sencillez y la profundidad de una existencia trágica como la del ser humano, marcada por su caducidad, además se atreve con sentimientos tan manidos como universales para dotarlos de un sello personal. Pero también cultiva con fortuna y destreza otros géneros, como el cuento y el ensayo, en el primero destaca el libro de relatos Cuentos neuróticos, que acaba de ver la luz en Chiado Editorial, y en el segundo ha publicado diversas muestras en antologías, como en el volumen XII de la colección Algo que Decir del Ateneo Republicano Blasco Ibáñez. Además tiene en su haber el mérito de haber obtenido una medalla de plata por mención especial en el Certamen Internacional Nósside, en Calabria, Italia.

El presente volumen se abre con dos poéticas donde define con pasión su oficio. A continuación Amparo Andrés “filoversa” en treinta y dos poemas donde transita por esa tierra de Nod, trasunto de este mundo donde el hombre debe purgar sus penas. Amparo Andrés se entrega a la descripción de “un negro prado de espinas” donde conviven la utopía de lo eterno con la soledad y la melancolía, un anhelo frustrado que deviene en silencio pues el tiempo, implacable, vence a los sueños, inventando quimeras transidas de olvido. He aquí que Amparo Andrés enarbola una voz con actitud crítica hacia “nuestro espíritu anestesiado”, que nos condena a una existencia abocada al vacío. En este sentido abundan los vocablos que delatan el desencanto ante tanta “anodina necedad”.

También la crisis económica es objeto de los versos, ante tal panorama la poesía es refugio que atempera la desolación “anunciando una vuelta/ como oleada eterna.” (“Secretos”). Resultan entrañables los poemas “Réquiem por un poeta”, en memoria de Mario Benedetti, escrito en un estilo que homenajea al escritor uruguayo: “sabrá usted, compañero/ que siempre con vos contaremos.”; y “Los soldados que no lucharon”, un himno a la dignidad y a la libertad de decidir.

Amparo Andrés toma la pluma con vocación especial para llamar a la conciencia para recordar “lo que en el fondo somos”. Su poesía es decididamente humana pues en ella se advierte un deseo de libertad y un ansia de esperanza. El tiempo y el temor al olvido animan muchos de sus versos en un intento de concitar la memoria a través de la palabra, pues sólo fijando la incertidumbre, la incredulidad y el desvelo se puede salvar el tiempo huido.

También la poesía es materia sobre la que Amparo Andrés “filoversa” como medio para alcanzar la eternidad aunque al cabo volvamos a ser nada. Sin embargo, es la sempiterna duda, “ser o no ser”, la que remueve e inquieta, la que impele a la autora a empuñar el verso para doblegar el tiempo. En definitiva, Amparo Andrés transcribe sus inquietudes en poemas para reflexionar sobre el sentido de la vida.

Portada del libro "Filoversando en Nod". / casadellibro.com

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