Beneficios de practicar la solidaridad
Practicar la solidaridad es necesario hoy en día, ya que, en muchas ocasiones, observamos que predomina el egoísmo. Ser solidarios puede ser nuestra mejor manera de cambiar el mundo.
Los diccionarios suelen destacar que la solidaridad consiste en brindar apoyo a causas o intereses ajenos, pero, con especial énfasis en aquellas situaciones que son complejas o difíciles. La verdad es que la mayoría de los seres humanos queremos ver un mundo mejor, pero, ¿nos hemos preguntado acaso qué aportes hacemos nosotros a diario?
Está bien trabajar en el tema del reciclaje, o emprender proyectos que generen ganancia social, pero, muchas veces la solidaridad va más allá de eso, pues, no solo genera beneficios a la persona o causa hacia la cual nos abocamos, sino que también puede ser provechoso para nosotros.
Ser solidarios puede mejorar nuestra salud emocional. Hay quienes apuntan a que ser altruistas nos permite construir una mejor autoimagen, sin embargo, más allá de lo que nuestras acciones proyecten sobre nosotros mismos, la solidaridad implica más ganancias de las que podemos imaginar.
En un mundo donde colma la incertidumbre, el miedo, o en el que muchas personas no cuentan con los recursos emocionales para afrontar la cotidianidad, un solo acto de solidad nos permite aliviar los temores de otro ser humano y hacer sus cargas más llevaderas.
Practicar la solidaridad también nos libera de estrés, pues, al ser solidarios participamos activamente en pro de una causa que es ajena a nosotros, y esa acción nos permite liberar nuestras propias tensiones.
Desconectarnos de nosotros por un instante y dejar de ser el centro del universo en nuestras vidas nos permite integrarnos al resto del cosmos y dar una parte nuestra al universo.
Ir más allá de nosotros mismos también nos facilita poner en práctica algo que muy pocos seres intentan lograr hoy día: la auto trascendencia
Trascender es algo que pocos pueden hacer. Es una característica propia de los seres humanos racionales y, sin embargo, algunos deciden vivir encerrados o aislados en su propio mundo sin atender nada externo.
Pero, esta situación nos puede poner en riesgo porque, aparte de hacernos seres egoístas, nos puede llevar al aislamiento emocional y a la incapacidad de practicar la empatía.
La capacidad de ser solidario también se encuentra asociada a movimientos internos que a nivel cerebral pueden ser positivos para nosotros, ya que nos proporciona bienestar, haciéndonos incluso olvidar nuestros propios problemas.
Asimismo, cabe señalar que los actos solidarios tienen una incidencia positiva en nuestra autoestima, pudiendo incrementarla de manera considerable. Vale resaltar que ser solidarios también refuerza la confianza en nuestras capacidades al igual mejora y contribuye nuestra vida al proporcionarnos la posibilidad de ver el mundo desde una óptica de la felicidad. Así que ya lo sabes, jamás dudes en ser solidario. @isbeliafarias90210 en @mundiario
