¿Desviación sexual? Conoce las 5 parafilias más extrañas
Cuando se trata del sexo, el único límite es qué tan lejos llega tu imaginación. Sin lugar a dudas, la especie humana disfruta de su sexualidad como ninguna otra, pero... Sin más preámbulo, conozcamos cuáles son las 5 parafilias más extrañas.
La sexualidad humana es tan variada como compleja, sobre todo el tema de la atracción sexual. Esta, no sólo depende en gran medida de factores biológicos y físicos, también la identidad sexual y la personalidad de cada individuo son aspectos a tener en cuenta. En este sentido, así como más temprano comentamos lo que son las fobias sexuales y las más comunes de ellas, es el turno de hablar sobre las parafilias.
Estas particulares "fijaciones sexuales", representan patrones de comportamiento en los que la fuente principal del placer no se halla en el acto sexual en sí, si no en las actividades o situaciones que acompañan a este. Y es que cuando se trata del sexo, el único límite es qué tan lejos llega tu imaginación. Sin lugar a dudas, la especie humana disfruta de su sexualidad como ninguna otra.
A pesar de que en ocasiones se habla de perversión o bien, conductas depravadas, estos comportamientos —siempre que no causen un daño propio a la persona en cuestión o a terceros— no deberían suponer mayor problema ni generar miedo o incomodidad. Por el contrario, puede resultar sano y estimulante para la salud y la libertad sexual. Conozcamos cuáles son las 5 parafilias más extrañas.
> Clismafilia: quienes la padecen, se excitan con la introducción de líquidos en el ano, pero no cualquiera. Para la estimulación sexual, utilizan enemas. Esta parafilia es, quizás, la más preocupante para los doctores, ya que puede resultar peligrosa.
> Urofilia y Cropofilia: la primera, consiste en la excitación o placer sexual por la orina ya sea bebiéndola o bañándose en ella. La segunda, es el mismo fetiche pero... con el excremento. En parte, ambas son consideradas como un tipo de humillación, pues estas personas, incluso, pueden disfrutar de ser ensuciados.
> Eproctofilia: esta parafilia se traduce en el amor a los gases. Quienes la padecen, se excitan mediante la inhalación de flatulencias directamente de sus compañeros, los que, seguramente, tendrán una dieta estricta en frijoles.
> Dendrofilia: por muy lejos que esta esté de las 4 anteriores, no por eso deja de ser extraña. Una cosa es sentir atracción por los árboles o las plantas, y otra muy distinta es el roce (incluso la penetración) con seres vegetales. Pues eso, los dendrofílicos disfrutan la belleza de la naturaleza... a su manera. @mundiario
