#Womanspreading o cómo abrir las piernas se ha convertido en una reivindicación feminista
Suena vulgar, pero abrir las piernas se ha convertido en una campaña para hacer valer la igualdad entre géneros.
Desde jóvenes nos enseñan que cuando nos sentamos debemos ser cuidadosas y siempre mantener las piernas cerradas, porque abrirlas en un ángulo de 180 grados sería absolutamente vulgar. En el caso de los hombres, no importa, podrían subirlas en la mesa y lo dejaremos pasar. Precisamente por esto, ha nacido #Womanspreading, una iniciativa que pide a las mujeres que se sienten como quieran para dejar claro que nadie debe decirnos cómo debe ser nuestro lenguaje corporal ante los demás y mucho menos si la regla no aplica a los hombres y puede ser igual de vulgar.
En el caso masculino, hemos sido testigos de cómo los modales quedan atrás y siempre optan por esa postura, no importa si están en lugares públicos, igual nadie las dirá o reprochará su forma de sentarse. Pero en el caso femenino, desde tiempos inmemoriales, se nos dice cómo comportarnos, caminar, sentarnos, hablar… y de faltar a alguna de esas normas sociales, somos fuertemente amonestadas o mal vistas.
De lo anterior, nace este movimiento que no busca que las mujeres crean que sentarse con las piernas abiertas es “cool” sino que es una forma de revelarse ante lo que dicta la sociedad que una “dama o señorita debe ser”. A estas alturas es algo ridículo que a una mujer se le exija llevar hábitos del siglo pasado y que además, se le censure cuando no los cumpla. Porque ser mujer no tiene que ver con el cómo nos sentemos, sino que tiene que ver con otros aspectos propios de nuestra personalidad. @mundiario
