La violencia de Sudán está violando toda la gama de derechos humanos
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos detalló que ha recibido al menos 25 casos de violencia sexual en Jartum y Darfur, aunque advirtió que el número real es probablemente mayor.
La situación en Sudán es “desgarradora”. Así lo catalogó el alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, quien pidió al ejército y al principal grupo paramilitar del país que detengan una “violencia sin sentido”. Las declaraciones del funcionario de la ONU se produjeron después de que las dos fuerzas enfrentadas hayan vuelto a violar un alto el fuego de una semana, supervisado por Estados Unidos y Arabia Saudí, que entró formalmente en vigor el lunes, en un nuevo intento de paliar la crítica situación humanitaria que se vive en la nación.
Asimismo, instó a los líderes de las Fuerzas Armadas de Sudán y de las Fuerzas de Apoyo Rápido, enfrentadas desde el 15 de abril pasado, a que dejen claro a quienes están bajo su mando que no tolerarán la violencia sexual y que todos los perpetrados rendirán cuentas. Según detalló el alto funcionario, su oficina ha recibido reportes de al menos 25 casos de violencia sexual en Jartum y Darfur, pero reconoce que el número real es probablemente mucho mayor.
Violaciones que ocurren en medio de una impunidad casi total. “Los esfuerzos para poner fin a este conflicto deben centrarse en los derechos humanos y la rendición de cuentas, para que la paz sea sostenida”, añadió Türk.
Más de un millón de desplazados
De acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), desde el inicio de los enfrentamientos en Sudán, más de un millón de personas se han visto forzadas a abandonar sus hogares. De estas, más de 840.000 se han desplazado internamente a otros puntos del país donde la situación de seguridad es más estable, mientras que más de 300.000 se han refugiado en países vecinos como Egipto, Chad, Sudán del Sur, Etiopía y la República Centroafricana.
Estos desplazados huyen de los combates entre el ejército de Sudán y los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido. Las batallas han dejado como mínimo 850 civiles muertos, más de 3.500 heridos y el sufrimiento de toda la población. Y es que según Radhouane Nouicer, experto de la ONU sobre los derechos humanos en Sudán, “se está violando toda la gama de derechos humanos”. “Lo que está ocurriendo es tan malo como todo lo que he visto en zonas de conflicto a lo largo de toda mi dilatada carrera. Es horrible, trágico, brutal y completamente innecesario”, añadió.
Türk, por su parte, afirmó que “la impunidad casi total de graves violaciones” de derechos humanos está en el origen de la lucha por el poder entre el ejército y los paramilitares, y pidió que los esfuerzos para poner fin al conflicto integren los derechos humanos y la rendición de cuentas para una paz duradera. @mundiario
