Trump asegura que es posible tener una vacuna contra la Covid-19 antes de noviembre

Donald Trump.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en una rueda de prensa en la Casa Blanca / Pixabay.

“Vamos a tener vacunas muy pronto, vamos a tener terapias muy pronto”, dijo el presidente estadounidense en un programa radial. La pandemia y la Covid-19 es la nueva arma político-electoral de Trump.

 

Trump asegura que es posible tener una vacuna contra la Covid-19 antes de noviembre

La primera economía del mundo no quiere perder su estatus de poder global en la nueva década que está por comenzar en 2021. Y la mejor manera de hacerlo es mediante el control del espectro científico-tecnológico enfocado en la creación del sistema de control global de la actual crisis que tiene a la humanidad sumida en la peor crisis del siglo XXI.

Y es que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este pasado jueves que “es posible” que el país obtenga una vacuna contra el coronavirus antes de las elecciones del 3 de noviembre. 


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Se trata de una previsión mucho más optimista que la expresada por los propios expertos en salud de la Casa Blanca, cuyo equipo epidemiológico no ve factible ni cercano un escenario en el cual EE UU logre inmunizar a su población civil antes del primer martes de noviembre, fecha que generará un punto de inflexión en el país con la elección presidencial que enfrentará al actual mandatario y a su rival demócrata, Joe Biden, pues quien llegue al poder convertirá a la nación en un actor más proteccionista o menos beligerante en la escena mundial, dependiendo de cuál de los dos resulte electo. 

Esto implica que controlar el nuevo mercado internacional y transcontinental que se creará con la potencial vacuna contra el coronavirus es el objetivo del llamado ‘país más poderoso del mundo’ para así lograr la expansión geopolítica que la Casa Blanca tiene agendada a partir de la renovación de la figura más influyente en la estructura de dominio financiero y político de la potencia norteamericana. 

Al ser consultado en un programa de radio sobre cuándo podría estar lista una vacuna, Trump respondió lo siguiente: “Antes de fines del año, podría ser mucho antes”. “¿Antes del 3 de noviembre?”, preguntó el presentador.

“Creo que en algunos casos, es posible que sea antes, justo alrededor de ese momento”, dijo el presidente estadounidense. 

Trump, que busca la reelección tratando de sacar a la economía estadounidense de la recesión con desbloqueos progresivos de la actividad empresarial, laboral y comercial, está presionando para reabrir los colegios y “regresar a la normalidad” pese a que las muertes por la pandemia siguen promediando más de mil por día. Es decir, la premisa de Trump en su administración de la vida civil consiste en retomar la normalidad social para no restarle dinámica al acerado sistema de vida de la sociedad norteamericana, incluso a pesar del enorme costo humano al que el propio presidente se refirió como “eso es lo que hay”, cuando en una entrevista fue consultado sobre el impacto de las más de 160.000 muertes por Covid-19 en su país, actual epicentro mundial de la pandemia. 

Altos funcionarios de salud del Gobierno estadounidense han dicho que “no se tomarán atajos en la carrera para conseguir una vacuna contra el virus”.

El doctor Anthony Fauci, el máximo experto en enfermedades infecciosas del Gobierno estadounidense, ofreció un punto de vista más conservador en una entrevista con la agencia Reuters el pasado miércoles: “Podría haber señales de que habrá al menos una vacuna útil y segura para fin de año”, dijo el reconocido epidemiólogo.

Entonces, el rumbo hacia la inmunización denota un largo camino en el cual EE UU deberá enfrentar el ciclo involutivo de la recesión, el auge del desempleo, el desgaste socioeconómico a medida que el consumo cae por el miedo al contagio en los rebrotes de los estados del sur y la retracción social de una buena parte de la población estadounidense. 

Trump se mostró animado ante la posibilidad de una recuperación de la economía estadounidense una vez que la vacuna esté disponible. “Vamos a tener vacunas muy pronto, vamos a tener terapias muy pronto”, dijo en el programa radial.

Sin embargo, esta crisis se da en un contexto donde se hace evidente la estrategia de Trump de utilizar la carrera científica global por la pandemia como un nuevo campo de Guerra Fría en los espacios geopolíticos con el objetivo de desplazar a Rusia y China del sistema global, así como también para ganar mercados, más aliados comerciales y expandir su sistema proteccionista, nacionalista y ultracapitalista dentro de EE UU usando la vacuna como un instrumento político para su campaña electoral. @mundiario 

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