¿Somos conscientes...?

Progreso. / Pixabay
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Me pregunto y le pregunto a usted, si no hemos caído en un decaimiento-angustia-depresión-tristeza que no es totalmente real teniendo en cuenta la realidad.

En su biografía se dice del papa Juan XXIII que en su infancia, en su casa, solo comían polenta, pero nunca pan blanco. Este caso nos puede llevar a plantearnos si somos conscientes de que en un siglo Europa ha cambiado hacia un nivel de riqueza y progreso, en casi todos los órdenes de la realidad, como jamás la humanidad ha visto o conocido. Actualmente, sin negar los enormes problemas existentes, ¿somos conscientes, de todo lo bueno y positivo que tenemos, que nuestros bisabuelos no disponían, en la mayor parte de los casos?

Hay que indicar que la polenta es un alimento del norte de Italia, Suiza, Serbia y otros países del centro de Europa. Era o es una especie de potaje con harina de centeno, farro, maíz, castañas o alforfón según las zonas de Europa.

También hay que decir que la familia del cardenal Roncalli tuvo más de diez hijos, y por si alguien no lo recuerda, Angelo Roncalli-Juan XXIII (1881-1963).                 

La cuestión que vamos a reflexionar en estas cientos de palabras, no va a ser sobre la biografía o hagiografía de esta persona y sus enormes responsabilidades religiosas, espirituales y todas las consecuencias, enormes que ha tenido para el ser humano de la segunda mitad del siglo veinte y para ahora mismo, a través de la marcha del Concilio Vaticano II. Sino más bien que reflexionemos sobre algunos aspectos del progreso y del aumento de riqueza en Europa en un siglo.

Recorre Europa ahora, especialmente en la Piel de Toro una sensación-sentimiento de perdida-angustia-frustración-fracaso, incluso depresión en muchos grados. No podemos negar las enormes deficiencias-errores-angustias-sufrimientos-desempleo que existe en la población hispánica. No podemos negar que como si fuésemos los niños nos han quitado el juguete, nos han abandonado las expectativas, en unos años, quizás en un lustro o en dos, nos hemos dado cuenta, que el progreso, al menos para nuestra sociedad, de momento está en crisis, es como darnos cuenta que tenemos enfrente un muro de hierro, hielo y titanio y somos conscientes de que estamos desnudos, y que la próxima generación va a vivir y existir peor que nosotros, en cambio nosotros llevábamos tres generaciones viviendo mejor la siguiente que la anterior.

Podemos pensar o reflexionar que en la década de 1880 cuando nació Roncalli, y nos cuentan en su biografía que su familia, no comía de niño y adolescente nunca pan blanco. Nos tenemos que dar cuenta que sería la época de nuestros bisabuelos, digamos cuatro generaciones anteriores a la nuestra. Y esto que citamos, que nos sirve para introducir este tema, sucedía en muchas partes de Europa, lo único que cambiaban los alimentos, en otros lugares eran patatas, en otras zonas eran cebada y otros cereales que ahora se consideran alimentos para animales, etc.

¿Sin negar los enorme problemas existentes ahora, y que habrá que buscar soluciones, somos conscientes del enorme progreso que la sociedad ha realizado en cien años? ¿Somos conscientes que hace cuatro o cinco generaciones, muchas mujeres, un porcentaje muy alto de mujeres se morían en el parto o en el postparto?

¿Somos conscientes de que hace cien años no existía seguridad social, no existía sistema de salud pública gratuita o semigratuita como ahora hay en Europa? ¿Somos conscientes que no existían educación y enseñanza universal para todo niño o niña en Europa, y ahora si existe, al menos en Europa?

¿Somos conscientes, que con todas las limitaciones existes actualmente, hay un sistema de ayudas al desempleo, y que hace cien años no existía, al menos en Europa, durante un tiempo? ¿Somos conscientes que en Europa, en casi todos los países, existen ayudas a desempleados de larga duración?

¿Somos conscientes como la tecnología, la tecnociencia, la ciencia y ciencias han cambiado el mundo, en casi todos los parámetros y variables y valores, y salvo algún elemento que pueda ser más negativo, en casi todo, a nivel social, el progreso técnico ha cambiado hacia mejor?

¿Somos conscientes que el ser humano hoy, el pueblo, yo soy parte del pueblo, cada ser humano, al menos en Europa tiene en teoría y en la práctica una multitud de derechos, que jamás el ser humano ha tenido, o no ha tenido en el desarrollo que actualmente dispone, especialmente a raíz de las consecuencias de las dos guerras mundiales, que se plasmó en la Carta de Derechos Humanos de diciembre de 1948?

¿Somos conscientes de todos los valores positivos de la democracia que hace cien años apenas existía?

¿Somos conscientes del valor que le damos a cada ser humano, la dignidad humana, y somos conscientes de la igualdad de género, cada vez mayor, a nivel teórico y práctico…?

No digo que todo vaya bien, no digo que no haya factores y variables y motivos que deben mejorar, algunos ostensiblemente. Pero también me pregunto y le pregunto a usted, si no hemos caído en un decaimiento-angustia-depresión-tristeza que no es totalmente real teniendo en cuenta la realidad. Jamás la humanidad ha progresado tanto en cien años, en multitud de aspectos de todas las áreas y esferas: sociales, políticas, económicas, psicológicas, antropológicas, jurídicas…

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