La Quinta Avenida de Nueva York festeja la edición 262 del tradicional desfile de San Patricio

Cada año (salvo cuando la pandemia lo impidió), unas 150.000 personas desfilan por la Quinta Avenida de Manhattan celebrando la gran tradición irlandesa de Nueva York, un rito popular que empezó en 1762, aún antes de la Independencia de Estados Unidos, y que tiene millones de seguidores por televisión. Las primeras fuerzas policiales de esta ciudad incorporaron una gran cantidad de oficiales de origen irlandés y aún hoy son muchísimas las asociaciones que mantienen la tradición fundamentalmente con bandas de música de la policía y bomberos que están lideradas por gaiteros con atuendos típicos, que poco han cambiado en más de dos siglos.

Obviamente cada vez que hay una gran manifestación en Manhattan se activa un gran despliegue de seguridad, sobre todo en los alrededores de la catedral de San Patricio que es el epicentro de este evento, donde confluyen las más altas autoridades.


La actual gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul tiene también ascendencia irlandesa y al llegar al desfile declaró "Los padres de mi padre emigraron de Irlanda a los Estados Unidos en busca de una vida mejor y hoy me enorgullece honrar las contribuciones que los neoyorquinos irlandeses-estadounidenses han hecho a nuestro estado y país”.
Tampoco faltó a la cita el alcalde de la ciudad, Eric Adams, quien desfiló agitando una bandera irlandesa.


Y el arzobispo de Nueva York, Cardenal Timothy Dolan, quien también tiene ascendencia irlandesa aprovechó para darse un baño de masas y sacarse fotos con infinidad de feligreses. Dolan es famoso por sus interacciones con los participantes del desfile, y volvió a dar la nota cuando un policía se acercó con su hijito en brazos a saludarlo y el intercambió la gorra de policía del pequeño por su sombrero de cardenal. @mundiario