Permiten a las autonomías convertir las residencias de mayores en centros sanitarios

Una residencia de mayores en Conil de la Frontera. / Fundación Gerón
Una residencia de mayores en Conil de la Frontera. / Fundación Gerón
La orden sale un día después de que la ministra de Defensa, Margarita Robles, revelase que la Unidad Militar de Emergencias (UME) había encontrado cadáveres de internos en varios de esos centros.
Permiten a las autonomías convertir las residencias de mayores en centros sanitarios

El Gobierno permite a las comunidades autónomas convertir las residencias de mayores en centros sanitarios. Así ha quedado registrada la orden en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Esta medida obedece a la situación epidemiológica existente, de manera que los internos enfermos de Covid-19 podrán ser atendidos allí sin ser trasladados a centros hospitalarios.

Sin embargo, el Gobierno no ha ofrecido ningún otro detalle sobre la manera en que serán dotados de recursos humanos y materiales, para que puedan asumir el compromiso planteado. La orden va dirigida todos los centros residenciales, públicos o privados, tanto de personas mayores como discapacitados. También ha puesto a estos centros bajo la supervisión de la inspección sanitaria.

La orden sale un día después de que la ministra de Defensa, Margarita Robles, revelase que la Unidad Militar de Emergencias (UME) había encontrado cadáveres de internos en varios de esos centros. “El Ejército, en algunas visitas, ha podido ver a ancianos absolutamente abandonados, cuando no muertos, en sus camas”, dijo Robles al Programa de Ana Rosa, de Telecinco. “Vamos a ser absolutamente implacables y contundentes en el trato que se dé a los mayores en esas residencias”, añadió, sin precisar en cuántas se produjeron estos hallazgos, ni dónde están ubicadas.

Desde este martes, el Ejército levantará acta de la situación de las residencias de mayores que visite, según fuentes de Defensa. Los equipos de la UME que acudan a estos centros para desinfectarlos llevarán unos cuestionarios en los que dejarán constancia del estado de las instalaciones, la falta de personal, la atención prestada a los internos, el número de contagiados, enfermos o fallecidos, etc. De esta manera el Ejecutivo tendrá una radiografía más precisa de la situación de estas residencias, que se han convertido en uno de los focos de la pandemia, y se remitirán a la Fiscalía del Supremo, que ha abierto una investigación. @mundiario

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