Nueva investigación destaca la influencia de las redes sociales en la alimentación de los niños

Niños utilizando sus celulares. / Pexels.com.
Niños utilizando sus celulares. / Pexels.com.

Las investigaciones actuales muestran que el respaldo de celebridades y la publicidad televisiva de alimentos poco saludables aumentan la ingesta de estos alimentos por parte de los niños.

Nueva investigación destaca la influencia de las redes sociales en la alimentación de los niños

Las investigaciones actuales muestran que el respaldo de celebridades y la publicidad televisiva de alimentos poco saludables aumentan la ingesta de estos alimentos por parte de los niños. Sin embargo, los niños están cada vez más expuestos al marketing a través de vías digitales, como en las redes sociales, y el impacto del marketing de los bloggers de video de YouTube (vloggers) en estos resultados no se ha conocido hasta ahora.

Según un informe reciente de Ofcom, los niños en el Reino Unido ahora acceden a las redes sociales más que nunca. Aproximadamente el 93% de los niños de 8 a 11 años se conectan, el 77% usa YouTube y el 18% tiene una cuenta de redes sociales. En los niños mayores (de 12 a 15 años de edad), el 99% se conecta, el 89% usa YouTube y el 69% tiene una cuenta de redes sociales. Ambos grupos de edad miran vloggers de YouTube.

Influencia de los Vloggers

La estudiante de doctorado Anna Coates, del grupo de investigación de Apetito y Obesidad de la Universidad, realizó un estudio para examinar el efecto de la comercialización en las redes sociales de los bocadillos (saludables y no saludables), a través de las páginas de Instagram de vloggers, en la ingesta de bocadillos de los niños.

Durante el estudio, 176 niños, con edades entre 9 y 11 años, se dividieron al azar en tres grupos iguales y se les mostró páginas de Instagram de vloggers populares creadas artificialmente, pero realistas (cada una tiene millones de seguidores). A un grupo se le mostraron imágenes del vlogger con bocadillos no saludables, al segundo grupo se le mostraron imágenes del vlogger con bocadillos saludables y al tercer grupo se le mostraron imágenes del vlogger con productos no alimenticios. Se midió la ingesta posterior de bocadillos de los participantes (opciones saludables y no saludables).

Los niños en el grupo que vieron las imágenes de bocadillos poco saludables consumieron un 32% más de calorías de bocadillos poco saludables específicamente y un 26% más de calorías en total (de bocadillos saludables y no saludables) en comparación con los niños que vieron las imágenes de no alimentos. No hubo una diferencia significativa en el consumo total de calorías, o el consumo de refrigerios saludables entre los niños que vieron el perfil de Instagram con imágenes saludables y los que vieron las imágenes que no eran alimentos.

Impactante y explotador

Del estudio, Anna Coates, dijo: "Estos hallazgos sugieren que la comercialización de alimentos poco saludables, a través de las páginas de Instagram de vloggers, aumenta la ingesta de energía inmediata de los niños. Los resultados están respaldados por datos de respaldo de celebridades que muestran que los endosos de alimentos poco saludables aumentan la ingesta de alimentos no saludables de los niños, pero los endosos de alimentos saludables tienen poco o ningún efecto sobre la ingesta de alimentos saludables.

"Los jóvenes confían en los vloggers más que en las celebridades, por lo que sus respaldos pueden ser aún más impactantes y explotadores. Se necesitan restricciones más estrictas en torno al marketing digital de alimentos poco saludables a los que los niños están expuestos, y no se debe permitir que los vloggers promuevan alimentos poco saludables para los jóvenes vulnerables en las redes sociales".  @mundiario

 

 

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