Una menor refugiada fue obligada a desnudarse para determinar su edad en España

Una niña mirando una protesta en la ciudad. Twitter.
Una niña mirando una protesta en la ciudad. / Twitter.
La joven camerunesa, de 16 años, llegó a Madrid huyendo de la violencia sexual y de un matrimonio forzado en 2017. La ONU ha censurado a España por violar su derecho a la intimidad.
Una menor refugiada fue obligada a desnudarse para determinar su edad en España

Arcange (nombre ficticio) llegó a Madrid en 2017, huyendo de la violencia sexual en el seno familiar y de un matrimonio forzado con un hombre mayor. La joven camerunesa, de 16 años, buscaba protección lejos de casa, pero el centro de acogida de menores que debía brindársela la sometió a un desnudo integral para la exploración de sus pechos y genitales, en el marco de un procedimiento de determinación de la edad. Cuatro años después, la ONU ha censurado a España por el caso. 

La menor huyó de Camerún con un pasaporte falso—que destruyó durante el vuelo- que consiguió gracias a la ayuda de su madrina. La Policía del aeropuerto la registró como “menor de edad posible solicitante de asilo” debido a su apariencia infantil, pero también porque contaba con documentos escolares y una cartilla de vacunación que indicaban su fecha de nacimiento. 

Fue trasladada a un centro de acogida de menores de Hortaleza, en la Comunidad de Madrid. Desde el centro notificaron su llegada a la Fiscalía de Menores, que ordenó activar un procedimiento de determinación de la edad. Arcange fue obligada a desnudarse para una evaluación forense que estableció, sin garantías, que la joven tenía más de 18 años. El fiscal declaró que era adulta y la menor tuvo que marcharse del centro de acogida. La niña vivió en la calle hasta llegó a la Fundación Raíces gracias a otro menor. 

La condena de la ONU

El caso llegó a  las Naciones Unidas en 2019, gracias a la organización que 'rescató' a la joven, y cuatro años finalmente se han reconocido sus derechos: el organismo ha condenado a España por violar las garantías de los niños que llegan solos al país. 

El Comité de Derechos del Niño del órgano con sede en Suiza ha denunciado que el proceso para establecer la edad de la niña, "quien declaró de manera reiterada y consistente ser menor de edad, quien se encontraba en posesión de documentos acreditativos de su minoría de edad y quien tenía apariencia de menor de edad", vulneró los derechos reconocidos por la Convención de Derechos del Niño, como el derecho a la intimidad y su dignidad. 


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180 días para rectificar el error

El dictamen de la ONU establece que España tiene 180 días para proporcionar a Arcange una reparación efectiva por las vulneraciones de derechos sufridas, una compensación por los daños morales, acompañamiento psicológico especializado y la rectificación de su fecha de nacimiento en su documentación, detalla El País.  

"En las circunstancias del presente caso, y en particular del examen utilizado para determinar la edad de la autora y la ausencia de un representante para acompañarla durante dicho procedimiento, el Comité considera que no se tomó el interés superior del niño como consideración primordial en el procedimiento de determinación de la edad al que fue sometido la autora, procedimiento que constituyó además una injerencia ilegal en su vida privada como víctima de violencia sexual", añade el documento. 

Asimismo, la organización reclama que el país prohíba los desnudos integrales y las exploraciones físicas de los genitales “que nunca deberían aplicarse” a los menores; adecue su procedimiento de determinación de la edad; y ampare la presunción de minoría de edad y la validez de la documentación aportada por los menores que llegan solos al país.

“Estoy muy alegre de que, al fin, se reconozca y se acepte que yo era una niña de 16 años cuando llegué a España y no 18 como ellos me echaron”, ha comentado la joven a Lourdes Reyzábal, presidenta de Fundación Raíces. “Llegué siendo quien era y me cambiaron”. @mundiario

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