La Manada sale de prisión, a cambio, las marchas femeninas se apoderan de las calles

La Manada sale de prisión. RR SS.
La Manada sale de prisión. / RR SS.

Los cinco condenados han abonado la fianza de 6.000 euros y a su salida se encontraron con un mar de medios y personas indignadas. Sin embargo, los acusados no tendrán fácil regresar a sus vidas porque a la par, grupos feministas se encargan de impulsar compañas de rechazo-

La Manada sale de prisión, a cambio, las marchas femeninas se apoderan de las calles

A las 18.00 horas tres de los miembros de La Manada -José Ángel Prenda, Jesús Escudero y Ángel Boza- salieron de la prisión de Pamplona luego de abonar los 6.000 euros de fianza fijados por la Sección Segunda de la Audiencia de Navarra. Una hora después, salieron los otros dos miembros –el guardia civil Antonio Manuel Guerrero y el miembro de la Unidad Militar de Emergencias (UME) Alfonso Jesús Cabezuelo- del grupo de la prisión militar de Alcalá Meco, en Alcalá de Henares, Madrid. Pero antes de que todo ocurriera, miles de personas salían a las calles a manifestarse en contra de la medida que ha ofendido a toda España.

Los miembros de La Manada estuvieron en prisión casi dos años, pero por decisión de los jueces han salido de la cárcel aunque sobre sus cabezas pesan condenas de hasta nueve años de prisión por abuso sexual. Su vida no será la misma y es que a su salida enseguida estuvieron rodeados por un mar de periodistas y personas indignadas. En el preciso instante en que salían de prisión, los grupos feministas empezaron a llevar a cabo campañas para impulsar el rechazo contra aquellos que amparen a los condenados.

A través de las redes sociales las feministas buscan evitar que los establecimientos les den trabajo o dejen entrar a los miembros de La Manada, buscando aislarlos por completo como forma de rechazo hacía lo que muchos consideran como una sentencia injusta. Las feministas abanderan lemas como: “En este establecimiento no atendemos a violadores. #Stopmanada. Este es un espacio seguro para las mujeres”; o “Sr. / Sra. Comerciante: Las mujeres no consumimos en establecimientos donde se atiende a violadores. Le invitamos a unirse a nuestra acción colocando un aviso a la entrada”.

 

El problema, es que el artículo 41. g del Texto Refundido del Estatuto de los Trabajadores ampara a tres de los cinco condenados, puesto que la ley establece que si el trabajador estaba bajo contrato al entrar a la cárcel y este se mantiene a lo largo de su estancia hasta que sale, el empleador debe admitirlo. En pocas palabras, aquellos que tenían trabajo, podrán regresar, pero esto no será tranquilo ya que sus caras son conocidas y las condenas de la sociedad no son fáciles de burlar, quizás se vean en la obligación de renunciar por la presión que la sociedad ejerza. Mientras, España se vuelca en protestas donde muchas personas, en su mayoría mujeres, salen para dejar claro su descontento por las injusta sentencia que han ordenado contra los cinco hombres que violaron a una joven que por aquel entonces contaba con solo 18 años luego de los San Fermines. @mundiario

 

 

 

 

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