El hispanista Stanley G. Payne sale en “En defensa de España” con un libro sobre la identidad

Defensa España [640x480]
El profesor Payne defiende a España.

Dice Stanley, citando a Azaña, que “las izquierdas de la II Republica fueron resueltamente antiespañolistas”, y asumieron la leyenda negra y la crítica de la historia de las instituciones tradicionales. Y algo de lo mismo le pasó a la izquierda burguesa.

El hispanista Stanley G. Payne sale en “En defensa de España” con un libro sobre la identidad

Es curioso que para defender la historia, la naturaleza, la personalidad y hasta la unidad de España como nación tengan que venir los más prestigiosos hispanistas a echarnos una mano. El que más recientemente lo hace es el prestigioso profesor Stanley G. Payne, catedrático emérito de historia de la Universidad de Wisconsin-Madison en su reciente libro “En defensa de España. Desmontando mitos y leyendas negras”, que fue Premio Espasa 2017.

En la contraportada de este libro leemos:

“Ningún otro país como España posee una historia tan rica en sus imágenes ni tan abundante en conceptos, mitos y leyendas. Es la historia más exótica de Occidente y también la más extensa y extrema en su envergadura, tanto cronológica como geográfica, y con mayores diferencias en las distintas épocas.

A lo largo de los siglos, la Historia de España se ha descrito y definido a partir de conceptos inusitadamente controvertidos: reino bárbaro decadente, conquista oriental, paraíso multicultural, guerra divina, Reconquista, Inquisición, primer imperio mundial, monarquía paneuropea, decadencia profunda, leyenda negra, país insurreccional que reclama su independencia, cultura romántica por excelencia, sociedad convulsa y/o revolucionaria, democracia militante antifascista, país fascista retrógrado, pionera democracia de consenso ... Algunas de estas descripciones son tópicos esencialmente falsos, pero la mayor parte se refiere a procesos o logros históricos muy complejos que requieren mucha matización. Este libro es una interpretación en el debate sin fin de la Historia de España, realizada siguiendo un desarrollo cronológico que explica la evolución del país y, con ella, los mitos, estereotipos y leyendas que se han construido a través del tiempo”.

Pero frente a esta suma de leyendas y mentiras, en nuestros días, han emergido los nuevos mitos: desde el de que “España no existe como nación” a que es una “nación de naciones” y otros parecidos.  Frente a tanto falso intelectual de camareta y frente a tanta propaganda indocumentada, Staley recuerda que ya San Isidoro incluye la “Alabanza de España” en la Historia de los Godos, cuando, dice, comenzó a conformarse una idea de España unida e independiente.

Las críticas más feroces contra los españoles surgen en la Italia del siglo XV, cuando los imbatibles soldados de la Corona de Aragón eran las tropas más famosas de su tiempo. La llamada Leyenda Negra fue fomentada, esencialmente, por las naciones que en su tiempo rivalizaban con España y esos prejuicios contra españoles y portugueses se adentraron incluso en el siglo XX. Y Payne no duda en afirmar que muchos de los estereotipos sobre España los crearon los propios españoles, y cita el caso de Fray Bartolomé de las Casas. Gran parte de esos prejuicios y críticas contra España mantuvieron, según este autor, hasta el siglo XVIII en que España deja de ser lo que el califica de “una potencia terrible”. En cambio, la resistencia española contra Napoleón poco después causó “asombro en Europa”.

Stanley G. Payne.

Stanley G. Payne

Parece que, en cierto sentido, como se podría observar estos días, dice Stanley, citando a Azaña, que “las izquierdas de la II Republica fueron resueltamente antiespañolistas”, y asumieron la leyenda negra y toda la crítica de historia de las instituciones tradicionales. Y algo de lo mismo le pasó a la izquierda burguesa.

Precisamente, uno de los aspectos centrales del libro se dedica al análisis de la existencia de una “identidad nacional” y la curiosa e infundada medida de incluir el sentido de lo nacional como algo rechazable porque se considera un elemento franquista, como lo denota por parte de algunos sectores el repudio de la propia bandera. Y en este sentido, el concepto España, Hispania, Spania, Espanha o Espanya aparece como tal, abarcando toda la península en numerosos documentos en lenguas romances.

Y para entender la existencia de la “nación española”, Payne toma prestado el pensamiento de Ricardo García Cárcel que distingue posiciones diferentes: Si consideramos la existencia de un Estado propio, común a todos los españoles como eje de la identidad española, ese concepto no emerge hasta el siglo XVIII con el Decreto de Nueva Planta de Felipe V. Si consideramos como clave de esa identidad la existencia de un territorio global, mantenido con estabilidad a lo largo de los siglos, nos vamos a 1512, con la anexión de Navarra, tras la conquista de Granada, de 1492. Otros modos de entender España serían la extensión del uso de una lengua general común, aparte de otras (el castellano, a partir del siglo XVI) y aun de otros encajes; pero si pensamos en la plasmación del concepto moderno de la plena conciencia de la soberanía nacional española hemos de acudir a la Constitución de las Cortes de Cádiz de 1812.

Este interesante libro es un completo recorrido desde los inicios del concepto de España hasta nuestros días, deteniéndose especialmente en el Antiguo Régimen, el liberalismo, la II República, la guerra civil, el franquismo, la transición y el presente. Payne concluye recordando que con frecuencia la historia de España, tanto más que la de otras naciones de Europa, ha sido intencionadamente distorsionada “por lo que las narraciones simplistas resultan inadecuadas”  y concluye que no cabe esperar solución inmediata a las propias controversias de nuestro tiempo, donde muchos desencuentros políticos se fraguan al margen de la verdadera historia.

De esa historia, como dijo el socialista y ex presidente de Italia Sandro Pertini, “España es una de sus grandes naciones”. @mundiario

 

Comentarios