La fruta, clave para el desarrollo del cerebro
Científicos revelaron recientemente un estudio en el que demuestran que los frutos son un factor esencial para el desarrollo de los cerebros.
Un equipo científico perteneciente a la Universidad de New York publicó un estudio en la revista especializada Nature Ecology & Evolution, en donde aseguran que una dieta rica en frutas es un factor determinante para que los humanos y los primates tengan un cerebro mucho más grande y desarrollado que otros mamíferos.
El nuevo estudio acaba con la vieja creencia en donde aseguraban que la inteligencia humana se debía a una gran medida a las convivencias desarrolladas en los grandes grupos sociales. La hipótesis es conocida como el ‘cerebro social’ y dicta que los animales que formaban grandes grupos desarrollaban un neocórtex mucho más complejo ya que debían de enfrentarse a problemas más difíciles, tales como colaborar o prever las acciones de otros.
Los autores del reciente estudio analizaron a 140 especies de primates para poder comprender las diferencias entre sus cerebros, dándole un enfoque diferente al del cerebro social. Los factores que tomaron en cuentan incluyen el tamaño del grupo, el sistema social, la forma de apareamiento y especialmente la alimentación que llevaban, en donde dividieron a los primates en cuatro grupos según la dieta que tenían: los folívoros, los omnívoros, los frugívoros y un cuarto grupo que contenía a aquellos animales que combinaban sus dietas.
El estudio logró demostrar que es la alimentación la que influye en una mayor medida en la fuerza y el tamaño que tienen los cerebros de los primates. Los animales que comían mayoritariamente frutas, fueron aquellos a los que pudieron clasificar con un cerebro especialmente grande, logrando tener hasta un 25% más de tejido cerebral que aquellos primates que comían hojas u otras plantas.
A pesar de sus descubrimientos, los científicos tienen una interrogante a la cual no le han encontrado una solución. Y es comprender por qué la fruta es capaz de desarrollar un cerebro superior; en su estudio dejan entrever que la dieta que llevan también tiene que ver con algunas demandas cognitivas y que no solo basta con comerse lo primero que encuentren, sino que deben de seleccionarlo minuciosamente.
La idea la obtienen de la necesidad de hacerse con el premio, es decir, las frutas no crecen en cualquier lugar y es necesario ingeniárselas para poder conseguirlas; según los científicos eso haría que los primates pensaran el cómo harían para conseguir o qué necesitan para llegar hasta su objetivo.
