El avance de una nueva ola de coronavirus pone en jaque a Francia. El presidente Emmanuel Macron ha anunciado que tomará medidas para hacer frente a la situación: cerrar los colegios, los comercios no esenciales y reforzar las limitaciones de los movimientos entre regiones en todo el país.

“Si nos mantenemos unidos y solidarios las próximas semanas, si logramos organizarnos las próximas semanas, veremos el fin del túnel (…) pido la movilización de todos este mes de abril donde nos jugamos mucho”, ha dicho el mandatario en un discurso formal desde el Elíseo. “La situación es más peligrosa que en otoño, porque el virus es más contagioso y más mortífero”, ha insistido.

Además, en el país se mantendrá el toque de queda, fijado a las 19:00 horas y el Ejecutivo ha adelantado que quiere “sistematizar” el teletrabajo. Respecto al cierre de los colegios, una medida a la que Macron hasta ahora se había negado, se mantendrá hasta el 26 de abril (en las guarderías y las escuelas de primaria) y el 3 de mayo (para alumnos de secundaria).

Las medidas llegan en medio de una situación crítica para Francia, que se aproxima a las 100.000 muertes por coronavirus. La tasa de incidencia nacional a siete días es de 377 por cada 100.000 habitantes y la ocupación de camas en cuidados intensivos ha alcanzado un nivel nacional en el 98,4%. @mundiario