El Ficcionario pide no hacer la vista gorda con la obesidad de niños y adolescentes

Esta semana el Ficcionario hace balance de las calorías que ingieren los adolescentes y las que gastan, resultando un superávit que ya quisiéramos los adultos para otras cuentas.

normatibizar. Someter la isla de Ibiza a una serie de normas.

nothabilísimo. Personaje destacable por su habilidad.

nothificar. (angl.). Comunicar una resolución con alta fidelidad. Es la condición fundamental del emisario.

notoryedad. (angl.). Fama o popularidad que proporciona el hecho de pertenecer al Partido Conservador británico.

nuboxidad. Conjunto de nubes cuyo mandato atmosférico es oxidar el cielo.

nueztro. Se dice del fruto del nogal cuando nos pertenece.

nuvoso. Estado del cielo cubierto de uvas, observable por cualquiera que no se haya subido a la parra.

ñudo. Nudo que se les forma en la garganta a ciertos antílopes africanos cuando se topan de improviso con un león o un cocodrilo.

ñúmero. Cantidad de ñus existentes en un rebaño.

obazión. Demostración entusiasta y ruidosa de admiración que las vísceras amigas hacen en honor del bazo. Vanesa Tírica lo relata de la siguiente manera: “Y entonces se escucha como el páncreas segrega aplausos con toda su fe; la besícula no para de mandar chasquiditos cariñosos; la vejiga está que revienta de risa; el estómago pone sus tripas a sonar; los pulmones exhalan desde el tórax sus mejores notas de acordeón oxigenado y el hígado -desde el lado opuesto- prorrumpe en "bravos" de todo corazón. Mientras tanto, los riñones no han dejado de reñir al responsable de algunos pitidos disonantes que desde más abajo se oían”.

obelixco. Monumento en forma de poste robusto y grueso conmemorativo de uno de los héroes más entrañables de la guerra de las Galias. Por cierto, Obélix no deja de enfurruñarse cada vez que le toman por gordo y rebaja para sí su fuerte corpulencia diciendo que, más exactamente, es "un poco rellenito" o que él "no es flacucho".

obESO. Adolescente que engorda anormalmente en la etapa educativa comprendida entre los 12 y los 16 años. No se trata solamente de que tenga más peso corporal del considerado saludable en función de su edad, complexión, sexo, etc. (sobrepeso), sino de que su cuerpo acumula de modo enfermizo gran cantidad de grasas, resultando su IMC igual o superior a 30 (obesidad). En términos silogísticos, podríamos decir que toda persona obesa tiene sobrepeso, pero que alguien con sobrepeso no tiene por qué padecer obesidad, aunque convenga no olvidar que lo uno suele ser el primer paso hacia lo otro. La alimentación inadecuada (con un abuso intolerable de hidratos de carbono, dulces y refrescos y un déficit espeluznante de frutas y verduras) y el confortable sedentarismo en que muchos adolescentes se instalan (que les entretiene jugando a la videoconsola o el ordenador en casa en lugar de ejercitarse, como antaño, jugando en la calle al pilla-pilla, al escondite o dando patadas a un balón) son los principales factores causantes de este preocupante fenómeno, que una vez aparece a edades tempranas tiende a volver a lo largo de la vida, de manera que se incrementa el riesgo futuro de padecer enfermedades crónicas como la diabetes u otras de tipo cardiovascular. Y es que el 4,7 % de los adolescentes españoles de entre 11 y 15 años sufren obesidad, una enfermedad que afecta a más de 1,4 millones de menores en Europa, según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) referido al año 2014. El estudio alerta de que el número de adolescentes obesos continúa creciendo en muchos países de Europa, mientras que en otros la cifra se ha estabilizado. Los porcentajes son especialmente elevados en el sur, con Grecia a la cabeza (6,5 %), Croacia (5,1 %), Portugal (5 %), España (4,7 %) e Italia (4,7 %). Por contra, los porcentajes más bajos se dan en Dinamarca (2,3 %), Holanda (2,3 %), Ucrania (2,4 %), Suiza (2,6 %) y Noruega (2,8 %). Todo lo cual se podría remediar, desde luego, alimentándose mejor (cuidando especialmente el desayuno, del que muchos niños y adolescentes prescinden o toman de forma deficiente pero que, en opinión de los expertos, es crucial para mantener la vitalidad y atajar la obesidad) y moviéndose más (el sedentarismo adolescente ha alcanzado la categoría de epidemia, pues el 80% de los jóvenes españoles no realiza el mínimo de actividad física recomendada por la OMS). Y para terminar, un consejo a esos padres que sí hacen la vista gorda: ocúpense más de que sus hijos desayunen bien y no se preocupen tanto de llevarles al instituto en coche: que vayan por sí mismos andando o corriendo. Especialmente ellos, los chicos, pues el informe también revela que en España la obesidad les afecta más del doble que a las chicas (6,4 % frente al 2,9 %).

obliciudad. Cualidad de la ciudad inclinada respecto de un plano.

oboyde. (angl.). Figura de chico ovalada. Un símbolo de nuestra época, ahora que el gordito de la clase ya no es, como tampoco el gafitas, una singular excepción. @mundiario