Tres excesos turísticos que han impactado en España
Uno de ellos ha sido el balconing, donde hemos visto a jóvenes ebrios saltando desde balcones para cumplir algún reto.
El turismo es tan bueno como malo, solo hace falta ver cómo han impactado los turistas a un país como Italia donde se ha tenido que controlar la cantidad de personas que acceden a lugares como Venecia, donde se han colocado una serie de accesos que dejan pasar a una cantidad estimada de personas para evitar el exceso de personas en el lugar a diario. En España se ha visto un crecimiento turístico desde el 2015, cuando alrededor de 68,1 millones de extranjeros visitaron el país. Algo bueno si se toma en cuenta el crecimiento del empleo y el impacto positivo económico que tienen estas visitas, pero también repercute en la locura desatada de los visitantes, en su mayoría jóvenes, que optan por actos impropios para supuestamente divertirse.
Presentamos tres casos excesivos a continuación:
El balconing
Se trata de una práctica donde los jóvenes ebrios, y en algunos casos drogados, deciden saltar de balcón en balcón de algún hotel para cumplir con un reto. Dicha modalidad se ha ido modificando de manera que los jóvenes llegan a saltar del balcón hasta la piscina del lugar. En lugares como Tarragona y Mallorca, han impuesto multas a los turistas de 300, 750 y hasta 1.500 euros si se atreven a realizar esta práctica.
Compras al desnudo
En 2014 fueron virales las fotografías de turistas en Barcelona que osaron pasearse por los supermercados desnudos. Los jóvenes ven atractivo el barrio de la Barceloneta, donde se encuentran con distintas discotecas y playas que se ven abarrotadas por turistas provenientes del Reino Unido que buscan algo de diversión con juergas hasta alta horas de la noche.
Mamading
En 2014, la localidad de Magaluf, en Mallorca fue un tema internacional por una práctica que causó el repudio general. El lugar es conocido por la gran cantidad de turistas que llegan y se emborrachan sin parar y durante aquel año, fue noticia gracias al vídeo de una joven irlandesa de 18 años que le practicó una felación a una serie de jóvenes borrachos para conseguir a cambio una copa. @mundiario
