España y otros cinco países se harán cargo de los migrantes del Open Arms
La Comisión Europea tiene casi cerradas las negociaciones para el desembarco de los migrantes rescatados por el Open Arms. Seis estados han hecho llegar su oferta a Italia de hacerse cargo de estas personas al momento que la nave llegue al país de la bota, de acuerdo a Giuseppe Conte, jefe de Gobierno italiao. Los países en cuestión son España, Portugal, Alemania, Rumania y Luxemburgo, según una lista adelantada por el propio Conte, aunque podría ampliarse en las próximas horas.
La fórmula de reparto sobre la solución de la crisis de esta embarcación, que está varada en alta mar ya desde hace dos semanas debido a que ni Italia ni Malta han accedido a recibirla, le habían imposibilitado dejar en tierra a los migrantes rescatados. En total hay 147 extranjeros a bordo, todos rescatados cuando naufragaban en el mar tras haber iniciado su periplo desde Libia. Al momento no se conoce a cuántas personas recogerá cada país porque eso dependerá de con cuántos estados se cuente al final de las negociaciones emprendidas por Bruselas esta misma semana.
Italia todavía no ha definido exactamente qué papel jugará en todo esto. El país de la bota tiene como responsabilidad mínima el desembarco, el cual se podría realizar en Lampedusa, así como de acoger a estos migrantes. No obstante, es probable también que una importante porción de aquéllos se quede ahí mismo.
Conte envió una carta a Matteo Salvini, ministro de Interior, en el que le explica cómo ha quedado la resolución a falta de detalles finales. La misma, publicada en Facebook, reza que ha sido usada por el primer ministro para invitar a su destinatario "a adoptar con urgencia las medidas necesarias para asegurar la asistencia y la tutela a los menores presentes en la embarcación". No obstante, también indica que Salvini desobedeció sus directrices. "Hablar como ministro del Interior y alterar una clara posición de tu presidente del Consejo, escrita negro sobre blanco (...) es un claro ejemplo de deslealtad, la enésima a decir verdad, que no puedo aceptar".
Rápidamente, el líder de La Liga devolvió el guante ante los medios de comunicación. Salvini aseguró que el gobernante le "reprocha una obsesión con (la política) puertas cerradas. Se la confirmo: tengo la obsesión de la seguridad de los ciudadanos. Si prefiere un ministro del Partido Demócrata y un regreso a los 200.000 miles de desembarcos, que lo diga", expresó. @mundiario
