Erase una vez una fantástica casita vagón en un bosque perdido de Canadá

Su interior es de cuento, tan acogedor que imaginar una tarde de lectura a los pies de la estufa de leña en invierno, es realmente un sueño.

Para muchos el ideal de hogar pasa por adquirir una mansión o algo similar en tamaño, un chalet o una masía, y es que por lo visto las dimensiones son por defecto la cualidad que parece imprescindible para marcar estatus o mejor calidad de vida.  

Sin embargo para muchos el tamaño no es una necesidad y este tipo de casita es una opción que puede ampliarse si es que la familia crece. Un precioso contraste a esas mega estructuras que al final se convierten en lugares poco personales donde la vida se acaba reduciendo a una sola estancia y acabas preguntándote para qué quieres tanta casa.

Esta pequeña casa vagón es algo especial, de hecho, podría ser el más caprichoso y mágico de los lugares donde poder vivir.

Situada en un bosque en la Columbia Británica, en Canadá, esta increíble casita tiene aproximadamente unos 25 metros cuadrados, posee una cocina de propano está construida a partir de materiales reciclados, y lo mejor de todo es su precio, unos 6.000 €.

Su interior es de cuento, tan acogedor que imaginar una tarde de lectura a los pies de la estufa de leña en pleno invierno, con un paisaje único como ese al levantar la vista, es realmente un sueño.

Posee unos hermosos techos abovedados y detalles minimalistas que hacen que no se sienta el espacio excesivamente pequeño. Todo está hecho a medida.

Incluso posee un lugar especial cerca de la ventana para poder obtener una sensación más cercana a la naturaleza, quizá lo mejor sea el lucernario que permite que la luz natural entre de forma directa o puedas contemplar las gotas de lluvia cayendo directas hacía el techo, y desde el dormitorio hay una increíble vista de un lago cercano, además si te aburres del paisaje puedes moverte, todo un lujo.

Es sin duda, el lugar perfecto para escapar de todo.