EE UU anuncia que deportará a los inmigrantes centroamericanos indocumentados
La crisis sanitaria mundial se ha convertido ahora en el pretexto perfecto e ideal de la administración de Donald Trump para endurecer su política migratoria y aislar a Estados Unidos de los enormes flujos migratorios provenientes de Centroamérica y que, a pesar de ser una de las regiones del continente y del planeta menos afectadas por la pandemia, sus migrantes tendrán las puertas totalmente cerradas para permanecer o entrar a la nación norteamericana.
Y es que el Gobierno de Estados Unidos anunció el pasado viernes que deportará a los migrantes de Centroamérica a su país de origen en el marco de las decisiones para evitar la propagación del coronavirus en el país, donde ya se registran 450 muertos y 35.000 casos de contagio por la Covid-19, lo que convierte a EE UU en el tercer país más afectado por la pandemia detrás de Italia y España.
"No son mexicanos siendo enviados a México. No los estamos enviando a México, sino a sus propios países. ¿Por qué tendría México que recibir a personas que no son de México? Los estamos enviando de regreso en el caso de Guatemala, Honduras y El Salvador y muchos otros países. Ellos volverán al país del que vienen", dijo el presidente de EE UU, Donald Trump, en una conferencia de prensa desde la Casa Blanca.
Con esta política aislacionista, Estados Unidos recurre ahora al método de la mitigación y contención que empleó su aliado diplomático y geopolítico en Europa, Reino Unido, para cortar la curva de propagación del coronavirus en su territorio. Así es cómo Trump busca evitar que la primera economía del mundo caiga en una recesión de la cual durante una década se la visto como inmune después del auge que tuvo tras su recuperación posterior a la crisis financiera mundial de 2008. @mundiario
