Editar embriones humanos con CRISPR es ya una realidad, ¿Es entonces el momento de hablar de ética?

El anuncio de los investigadores en Portland, Oregón de que han modificado con éxito el material genético de un embrión humano tomó a algunas personas por sorpresa. Con titulares que se refieren a la investigación "innovadora" y "bebés de diseño", usted podría preguntarse qué lograron realmente los científicos. Este fue un gran paso adelante, pero no inesperado. A medida que este tipo de trabajo continúa, sigue planteando preguntas sobre cuestiones éticas y cómo debemos reaccionar.

Durante varios años hemos tenido la capacidad de alterar el material genético en una célula, usando una técnica llamada CRISPR. El ADN que compone nuestro genoma comprende secuencias largas de pares de bases, cada base indicada por una de cuatro letras. Estas letras forman un alfabeto genético, y las "palabras" o "frases" creadas a partir de un orden particular de letras son los genes que determinan nuestras características.

CRISPR es una herramienta que permite a los científicos dirigirse a un área específica de un gen, trabajando como la función de búsqueda y reemplazo en Microsoft Word, para eliminar una sección e insertar la secuencia "correcta". En la última década, CRISPR ha sido la principal herramienta para aquellos que tratan de modificar los genes humanos.

Entre otras cosas, se ha utilizado en experimentos para hacer mosquitos resistentes a la malaria, modificar genéticamente las plantas para ser resistentes a la enfermedad, explorar la posibilidad de mascotas y ganado de ingeniería, y tratar potencialmente algunas enfermedades humanas, incluyendo el VIH, la hemofilia y la leucemia.

A principios de este año, un comité internacional convocado por la Academia Nacional de Ciencias publicó un informe que, a la vez que destacaba las preocupaciones con la ingeniería genética de la línea germinal humana, estableció una serie de salvaguardias y supervisión recomendada. El informe fue ampliamente considerado como la apertura de la puerta a la embrión de edición de la investigación.

Los expertos consideran que es momento de decidir cuándo y cómo debemos utilizar esta técnica. ¿Debe haber límites en los tipos de cosas que se pueden editar en un embrión? Si es así, ¿Qué implican? Estas preguntas también suponen decidir quién puede establecer los límites y controlar el acceso a la tecnología.

También podemos estar preocupados acerca de quién puede controlar la investigación posterior usando esta tecnología. ¿Debe haber supervisión estatal? Puede ser difícil elaborar directrices que restrinjan sólo la investigación que alguien considere desagradable, al tiempo que permite que otras investigaciones importantes continúen. Además, el uso de tecnologías de reproducción asistida (el FIV, por ejemplo) está ampliamente desregulado, y la decisión de establecer restricciones sin duda planteará objeciones tanto de padres potenciales como de proveedores de FIV.

Además, hay preguntas importantes sobre el costo y el acceso. En la actualidad, la mayoría de las tecnologías de reproducción asistida sólo están disponibles para las personas de ingresos más altos. Hasta ahora la promesa de la ingeniería genética para la erradicación de la enfermedad no ha cumplido tampoco con sus promesas.

El anuncio del estudio de Oregon es sólo el siguiente paso en una larga línea de investigación. Sin embargo, seguramente traerá muchos de los temas sobre embriones, investigación sobre células madre, ingeniería genética, y tecnologías reproductivas de nuevo al centro de atención. Ahora es el momento de averiguar cómo queremos que esta tecnología cumpla con su rol en la sociedad.