Dióxido de cloro, un químico muy peligroso que promete curar la Covid-19
La búsqueda de una cura milagrosa para la Covid-19 está llevando a muchos a probar con fórmulas peligrosas.
No existen curas milagrosas, la ciencia cada día trata de encontrar una vacuna con la que todos podamos estar a salvo, pero hay quienes deciden creer que los atajos existan y terminan por poner su vida en peligro.
Es el caso de quienes han recurrido al dióxido de cloro, un peligroso químico, para “protegerse” o “curarse” del coronavirus. Pero, lo cierto es que no hay evidencias científicas que respalden esta creencia, aunque sí miles de vídeos circulando en las redes sociales con falsos testimonios de personas que supuestamente se han curado con este químico.
A este producto también se le conoce con el nombre de “Suplemento Mineral Milagroso” y tiene años tratando de encontrar un espacio en el mercado, bajo el eslogan de que cura múltiples afecciones que van desde la diabetes hasta la malaria y el autismo, pero no hay nada que lo sostenga.
Hasta el presente, no hay una institución sanitaria que reconozca su efectividad, o que lo considere siquiera un medicamento, pero, ahora que estamos en medio de una pandemia, los publicitantes de este químico vuelven a hacer otro intento por venderlo a los más incautos.
No obstante, es necesario aclarar que los peligros que se esconden detrás del dióxido de cloro son muchos, y no es una casualidad el que tantas autoridades sanitarias ya hayan alertado sobre el uso de este.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FEDA), ya ha comentado al respecto que: “No hay ninguna evidencia científica que apoye su seguridad o eficacia, y presenta riesgos considerables a la salud de los pacientes”.
Este químico, en realidad, es similar al cloro o a la lejía, pues, es una sustancia compuesta en un 28% de clorito de sodio en agua destilada. Funciona como un desinfectante que, bajo ninguna circunstancia, debe ser ingerido, pues, los efectos son potencialmente mortales.
Quienes ya han osado a probarlo, han experimentado insuficiencia hepática aguda, insuficiencia respiratoria y ritmos cardiacos anormales. Otras personas presentación destrucción de glóbulos rojos, diarrea y vómitos severos.
Es fundamental dejar de creer en la supuestas propiedades antivirales, antibacterianas o antimicrobianas que el químico posee, pues, es completamente falso. @isbeliafarias90210 en @mundiario
