Del "Deliciosa calma" al debate sólo de mujeres
Las chicas con las chicas. Pero, ¿es lo mostrado en su anuncio por los señores de Pavofrío y el debate sólo entre mujeres la igualdad que realmente queremos y necesitamos?
Desde que salió el anuncio del Deliciosa calma, llevo dándole vueltas a la idea que subyace detrás de él y el porqué a pesar del éxito que ha tenido entre muchas mujeres a mí no terminaba de convencerme. Es "supuestamente" un anuncio reivindicativo sobre la presión social que soportamos las mujeres en la sociedad actual en la que debemos ser buenas madres y buenas trabajadoras, y todo sin despeinarnos y siempre perfectas. Por eso un grupo de mujeres se van a un restaurante solo para mujeres, regentado por mujeres y en las que el servicio son solo mujeres. Por cierto, casi todas ellas igualmente divinas y siguiendo los mismos estereotipos contra los que luchan los supuestos platos que se ofrecen en la carta de ese restaurante.
A primera vista, el mensaje engancha, porque yo, igual que muchas otras mujeres, me reúno con mis amigas siempre que puedo, probablemente mucho menos de lo que me gustaría, y nos echamos unas risas entre nosotras con todos esos temas, me imagino que exactamente igual que los hombres cuando quedan entre ellos. Los grupos que se reúnen y ven la vida desde un punto de vista similar, siempre pondrán sobre la mesa aquello que les diferencia de los otros . Los padres nos quejamos de los hijos, los hijos de los padres, las mujeres de los maridos, los maridos de las mujeres, los empleados de los jefes y los jefes de los empleados, los profesores de los alumnos y los alumnos de los profesores, etc.
Pero eso no es reinvindicar, es desahogar tus penas con tus iguales. Con alguien que sabes que padece esa misma presión y ve la vida desde tu mismo punto de vista.
Por eso no me gusta el anuncio, porque no reivindica, porque sigue siendo un desahogo entre mujeres. La verdadera reivindicación es decirle todo eso al que te provoca la presión. Quejarse entre los que padecen lo mismo que tú, no es reivindicar.
Lo mejor de todo es que el anuncio dice: “Una sociedad equilibrada también ayuda a reducir el estrés” ¿Donde está el equilibrio en un lugar solo para mujeres? Señores de Pavofrío, equilibremos ese lugar. Y probablemente sería una buena idea empezar predicando con el ejemplo e incluir en la cúpula directiva de su empresa alguna directora general, por ejemplo. Y no digo que contraten a una mujer solo por el hecho de ser mujer, pero seguro que en España hay mujeres directivas tan válidas o más que los hombres que ahora ocupan esos cargos. Analicen si ustedes mismos las miran de la misma forma que a un candidato masculino y así le darían credibilidad a su eslogan y ayudarían a que en algún momento utilizar la presión social que sufren las mujeres no fuera un concepto que se utilice en marketing para aumentar las ventas de un producto.
Pero esa misma falta de equilibrio es lo que me pareció el debate de "sólo chicas" de ayer en Antena 3 donde las representantes femeninas del PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos debatían entre ellas
¿Por qué un debate solo de mujeres?
No discuto que no sea un hito histórico poder ver a cuatro mujeres debatiendo de política en la televisión en Prime Time, y por eso la Directora General de Antena 3 Noticias, Gloria Lomana presumía de ello diciendo :
Por primera vez, las mujeres serán las absolutas protagonistas de un debate electoral en España. Todas ellas representan el emponderamiento de la mujer en la vida política española, un reto que también a nivel económico, social y cultural es imparable.
¡Claro que es imparable! Pero ese empoderamiento no lo queremos para igualarnos entre nosotras, sino con ellos.
Porque es cierto que los candidatos de esos cuatro partidos a la presidencia de gobierno en estas elecciones son cuatro hombres, y que habrá que preguntarse porqué ninguna mujer en esos partidos ha tenido la valentía o la oportunidad de serlo, pero organizar un debate solo de mujeres para compensar la masculinidad de esos cuatro candidatos y demostrar así que las mujeres son igual de válidas, no es la forma correcta de defender esa igualdad. Esto vuelve a ser lo de los chicos con los chicos, las chicas con las chicas. Creo que cualquiera de las mujeres que están en las listas de los partidos políticos debería tener la capacidad de enfrentarse en un debate a sus contrincantes políticos, sean del sexo que sean, lo mismo que se le presupone esa capacidad a los hombres de esos partidos.
Porque sí es cierto el eslogan de Pavofrío: “Una sociedad equilibrada también ayuda a reducir el estrés”. Equilibremos, pues. No nos hacen ustedes un favor, se lo hacen a la sociedad.
