Las tetas se dejan ver en el Congreso, esta vez a favor del derecho al aborto

Sea como fuere y, para ser la primera acción destacada de Femen en la arena política nacional, la performance llevada a cabo es muy digna del sello made in Femen: forcejeos, momentos de cierta tensión, incomodidad manifiesta en las filas conservadoras,  aplausos de  Izquierda Plural, indignación del propio Gallardón, detención de las activistas y, la consabida polémica que estas acciones en topless generan indefectiblemente en los medios de comunicación y la opinión pública.

La irrupción de las tres activistas de Femen en el Congreso interrumpiendo  al ministro de Justicia  Alberto Ruíz Gallardón a grito de “Aborto es sagrado” no es una sorpresa. Concretamente esto es algo que ya había adelantado la líder de Femen en España, la asturiana Lara Alcázar. De hecho, en una entrevista que le hicieron el pasado verano, ella avanzaba que en septiembre tenían ya previsto una protesta frente a la modificación de la ley del aborto que pretendía llevar a cabo Gallardón. Además, conviene recordar al lector que ya durante el pasado mes de agosto, las activistas de Femen España habían estado entrenándose como tales con disciplina cuasi militar, en un campamento que tuvo lugar en la sede internacional que el movimiento tiene en París.

Sin embargo, el hecho de que esta primera acción notoria de protesta de Femen España se haya retrasado hasta octubre, habrá tenido más que ver con cuestiones de oportunidad y estrategia.

Los hechos tuvieron lugar esta mañana. Al parecer,  tres activistas de este movimiento femenino de protesta, lograron acceder al Congreso mediante lo que se conoce como "turno libre", el cual posibilita a los ciudadanos el estar presente durante las sesiones plenarias. Una vez allí, cuando Gallardón se disponía a responder a una pregunta de una diputada de UPyD, Irene Lozano, a propósito del tema de los inmigrantes,  profirieron a gritar su consigna.

Entre las tres activistas, que protestaron en topless, en pantalones vaqueros oscuros y con la mencionada consigna pintada en sus torsos, se encontraba la propia Lara Alcázar quien, al parecer y según diversas fuentes habría resultado finalmente detenida.

Sea como fuere y, para ser la primera acción destacada de Femen en la arena política nacional, la performance llevada a cabo es muy digna del sello made in Femen: forcejeos, momentos de cierta tensión, incomodidad manifiesta en las filas conservadoras,  aplausos de  Izquierda Plural, indignación del propio Gallardón, detención de las activistas y, la consabida polémica que estas acciones en topless generan indefectiblemente en los medios de comunicación y la opinión pública.