David Carrick: condenan a cadena perpetua al policía de Londres que violó a 12 mujeres

El agente de la Scotland Yard ha sido condenado a un mínimo de 30 años de prisión por haber cometido reiteradas agresiones sexuales entre 2003 y 2020 en Londres.
El agente de la Policía Metropolitana de Londres, David Carrick, ha sido condenado este martes a cadena perpetua por haber violado y agredido a unas 12 mujeres entre 2003 y 2020, a las que intimidó usando su cargo dentro de la Scotland Yard. El británico de 48 años ha sido sentenciado a un cumplimiento de 30 años y 239 días mínimos tras las rejas.
Carrick, que se unió al cuerpo policial en 2001 y se incorporó al comando de protección parlamentaria y diplomática, se había declarado culpable de 49 cargos penales hace unas semanas, incluyendo 24 por violación, en un juicio celebrado en un tribunal de Southwark en Londres.
La jueza Bobbie Cheema-Grubb sentenció a Carrick después de escuchar el testimonio de varias de las víctimas, que han calificado al detenido como un “monstruo” que en muchas oportunidades las retenía contra su voluntad y las sometió a “brutales y violentos” ataques sexuales. Para el momento del juicio, Carrick ya llevaba más de un año en prisión después de ser expulsado del cuerpo policial, en mitad de un caso que se mantuvo en secreto total.
Carrick conoció a algunas de sus víctimas a través de plataformas de citas en internet y en otros eventos sociales, donde aprovechaba su placa para ganarse su confianza de las víctimas y para amenazarlas. También lo hacía a través de fotografías que se tomaba con uniforme y posando con armas. Sin embargo, su carácter agresivo no era ninguna novedad, pues sus compañeros le dieron el apodo Bastad Dave (Dave el Bastardo) del que solía mostrarse orgulloso y alardeaba ante sus víctimas.
En octubre de 2021 fue detenido y suspendido de todas sus funciones y en diciembre pasado se declaró culpable de 43 delitos relacionados con otras 11 mujeres, cometidos entre marzo de 2004 y julio de 2020 en otra causa judicial abierta ante el Tribunal penal de Old Bailey. Esos delitos abarcaban 20 cargos por violación, nueve por agresión sexual, cinco por agresión con penetración, tres por comportamiento coercitivo y controlador, dos por detención ilegal, dos por intento de violación, uno por intento de agresión sexual con penetración y otro por provocar que una persona se involucre en actividad sexual sin consentimiento.
La jueza rebaja la pena de Carrick
Pese a las señales de alerta en su entorno, nunca se aprovecharon las oportunidades para imputarle cargos. De hecho, en julio de 2001 fue arrestado bajo sospecha de haber violado a una mujer, pero el caso terminó siendo desestimado sin que fuera suspendido. Dos meses después fue arrestado nuevamente, pero el caso no alcanzó a llegar a la Corte a pesar de que ese mismo año apenas se había incorporado a la Policía después de servir en el Ejército entre 1996 y 1997.
La magistrada Cheema-Grubb ha explicado que le ha reducido una pena inicial mínima de 60 años, que tenía que cumplir antes de ser considerado para recibir la libertad condicional. La decisión de la jueza se produce después de que el acusado admitiera los hechos y tras descontar el tiempo que ha pasado en prisión preventiva desde octubre de 2021.
Por su parte, la Policía Metropolitana londinense se ha disculpado por no haber identificado ni expulsado antes a Carrick, considerado ahora como uno de los mayores agresores sexuales en el Reino Unido. El caso, junto a otros similares, han fragmentado la credibilidad de la Policía y abierto una brecha de desconfianza con la sociedad británica. @mundiario