La crisis política en Brasil se agudiza en plena propagación del coronavirus
La propagación del coronavirus sigue golpeando a Brasil. Según el Ministerio de Salud, el gigante de Sudamérica registró, en las últimas 24 horas, cerca de 407 decesos por la enfermedad. Esta cifra asciende a 3.313 víctimas mortales. Mientras que los contagiados son 49.492, luego de que se registraran otros 3.735 ayer.
Según el periódico O Globo, el fuerte crecimiento se explica en parte por el rápido avance de la pandemia en Brasil, un país en el que los estados han adoptado diferentes estrategias para controlar al virus, sólo en algunos casos la cuarentena obligatoria, y en donde el mismo presidente, Jair Bolsonaro, aboga activamente por abrir la economía.
Si observamos el mapa de propagación de coronavirus, el estado de San Pablo, el más poblado de Brasil, es también el más afectado con 1.345 muertes y 16.740 casos confirmados. Sin embargo, más allá de este complicado panorama en el sistema sanitario, también se suma la inestabilidad política.
Sergio Moro, una de las figuras más representativas del Gobierno, ha advertido que presentará su renuncia si Bolsonaro decide reemplazar al director general de la Policía Federal, Mauricio Valeixo. Este funcionario es uno de confianza el antiguo juez, quien elevó de manera significativa su perfil público al ponerse al frente de la mayor causa de corrupción de Brasil, conocida como Operación Lava Jato.
La cúpula de la Policía Federal ya está en alerta sobre las intenciones del presidente y el diario O Globo reportó que el Secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Anderson Torres, y el director general de la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin), Alexandre Ramagem, ambos listados para reemplazar a Valeixo, tuvieron conversaciones con Bolsonaro en las últimas semanas.
Como sea, un informe de Reuters advirtió que Jair Bolsonaro se encontró aislado en una tensa reunión del gabinete a principios de abril que convocó en la residencia oficial del presidente brasileño para resolver la disputa con Mandetta, quien se opuso públicamente a su posición de reducir las restricciones de cuarentena para los 210 millones de habitantes de Brasil.@mundiario
