¿Cómo nos afectarán en un futuro próximo las plantas virtuales de energía?
Cuando pensamos habitualmente en plantas de generación de energía, pensamos en las grandes plantas de carbón, nucleares, gas o grandes plantas fotovoltaicas gestionadas por multinacionales, pero no pensamos en plantas virtuales.
Las plantas virtuales de energía coordinan el uso del software y tecnologías de comunicación, agregando diferentes recursos energéticos (plantas fotovoltaicas, eólicos, biomasa...) en cantidades importantes, dando unos servicios que hasta el momento daban de forma exclusiva las grandes compañías eléctricas a través de sus grandes instalaciones energéticas. Los modelos en los que se basa el funcionamiento de estas plantas virtuales pueden ser variados, así, por ejemplo, en Australia se basan principalmente en agregar y coordinar tanto baterías de almacenamiento energético, como plantas solares en los tejados de viviendas o industrias. Pero como digo, la combinación puede ser muy variada, incluyendo en algunos casos incluso plantas de energía fósiles, quiero decir con esto que no son de exclusividad de las energías renovables, siendo elementos ideales para la transición energética.
Existe a mi modo de ver una necesidad en desarrollar en España plantas piloto virtuales conectadas a instalaciones físicas reales, que permitan extrapolar los resultados a plantas reales y de mayor potencia. En este sentido habría que pensar si el operador Red Eléctrica de España, principal responsable y encargado de asegurar el sistema eléctrico, esta preparado para la inclusión de estas plantas de gran potencia en el mercado Energético Ibérico, posiblemente de forma masiva.
La integración de estas plantas virtuales en nuestro sistema eléctrico será positiva ya que podrán permitir el uso eficiente y la optimización de todos los recursos disponibles en tiempo real, siendo beneficiarios de ello todos los consumidores y los propietarios de plantas. Por eso creo que este tipo de plantas van a tener un papel importante en los próximos años en el mercado Energético Ibérico.
Los beneficios por parte de los prosumidores (consumidores y generadores de energía a la vez) o solamente consumidores son claros, ya que permitirán poder cobrar por aquellos servicios que estén dispuestos a dar al sistema, tanto en generación como en almacenaje, comprando o vendiendo su energía según sea más favorable el mercado. @mundiario
