¿Tiene sentido hoy en día organizar copiosas cenas medievales?

Trajes de cena medieval.
Trajes de cena medieval. / Mundiario

El  Casino de A Coruña sigue celebrando el 125 aniversario de su fundación con numerosos actos, entre ellos una cena medieval. Un motivo más para el buen humor.

¿Tiene sentido hoy en día organizar copiosas cenas medievales?

El  Casino de A Coruña sigue celebrando el 125 aniversario de su fundación con numerosos actos, entre ellos una cena medieval. Un motivo más para el buen humor.

El  Sporting Club Casino de A Coruña sigue celebrando el 125 aniversario de su fundación con diferentes actos: conciertos, conferencias, torneos deportivos… No falta a la cita la organización de cenas en las que se dan cita numerosos socios y amigos del club. El buen humor y los deseos de disfrutar de estos eventos hacen que resulten muy atractivos. Recientemente se celebró en los salones que esta centenaria sociedad posee en la calle Real la ya tradicional cena medieval. El espacio fue ambientado como corresponde a tal celebración y los asistentes, caracterizados de época. Así pudimos disfrutar de la compañía  de damas elegantísimas, luciendo trajes de rica factura, caballeros ataviados con  ricos sombreros y vistosos jubones, pregoneros que  tenían puntualmente informados a los presentes de las noticias  que se estaban produciendo, etc. Tampoco faltaron mesoneros de postín, encargados de servir el copioso menú en  el que no faltaron  típicos manjares. Un buen caldo, mejillones, pulpo, codillo braseado… No faltó de nada. Tampoco los caldos procedentes de la Abadía  de San Salvador  de Sobrado, así como una deliciosa queimada con  sus “conxuros”y castañas asadas. Imprescindibles, cómo no, las filloas con miel  y café arábigo…

Los asistentes hicieron suyas las recomendaciones de la dirección que decían: "Cenen hoy vuesas mercedes en paz, las guerras bien quedaron atrás, degusten lo que se servirá, que buen seguro será un manjar y beban el buen vino, también bailen en este lugar y después cada cual decidirá…” Todo ello amenizado por la música interpretada por los trovadores componentes del trío Nostalgia, música tan del gusto de los asistentes que dio lugar a un animado baile que duró hasta altas horas de la madrugada. Como debe ser.

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