Bandia Ribeira, ganadora del XII Premio de Creación Fotográfica Luis Ksado

Bandia Ribeira, fotógrafa gallega, ganadora del Premio Luis Ksado 2015
Bandia Ribeira, fotógrafa gallega, ganadora del Premio Luis Ksado 2015.

Su ensayo fotográfico ganador se centra en la vida de una comunidad de personas que viven en un bosque cercano de la ciudad de Edimburgo, con normas diferentes.

Bandia Ribeira, ganadora del XII Premio de Creación Fotográfica Luis Ksado

Su ensayo fotográfico ganador se centra en la vida de una comunidad de personas que viven en un bosque cercano de la ciudad de Edimburgo, con normas diferentes.

Entre ciento nueve participantes, la fotógrafa gallega Bandia Ribeira (As Pontes 1979) resultó ganadora del  XII Premio de Creación Fotográfica Luis Ksado, que organiza la Diputación de A Coruña, con su serie titulada El vuelo del 'midgie'. El jurado del premio,  que estuvo compuesto por los  fotógrafos Xurxo Lobato,  Ricky Dávila, Pierre Bonnord y Ana Lage, y la comisaria artística Ángela Ferreira, expresó en su fallo que “la obra ganadora trata un tema de actualidad, utiliza un lenguaje contemporáneo con lírica y sensibilidad,  presenta un concepto nuevo de lafamilia y revisa el concepto de maginalidad”. Considera el jurado a través de una nota de prensa que "la autora de la obra huye de premisas reparadoras y sanitarias" y lleva a los que observan la fotografía "a un umbral de periferia social en permanente revisión".

Desde MUNDIARIO logramos conversar vía internet con Bandia, quien reside en Gales, en estos momentos, para conocer más detalles de su ensayo premiado, de su interés por la fotografía,  qué hace en ese lugar y de sus planes futuros.

- ¿Dónde tomó las fotos? 

- En Escocia, en un bosque cercano a la ciudad de Edimburgo donde vive una comunidad de personas. Me interesaba mucho este lugar por su cercanía a la ciudad y la vez estar tan lejos, viviendo sin agua, electricidad y con unas normas y códigos diferentes.

- ¿Cómo fue su trabajo, cómo lo hizo? 

- Lo hice yéndome a vivir allí en periodos intermitentes durante 2014 y 2015. Allí pasaba 2 semanas más o menos y después volvía a casa en Gales y editaba el material y lo revisaba con los tutores, ya que este fue mi proyecto final de la universidad. Hubo mucha discusión y falta de entendimiento a veces pero lo bueno de este curso es que al final presentamos el trabajo que nosotros queremos, como no puede ser de otra manera.  Así fui haciendo desde octubre hasta junio. Al mismo tiempo iba leyendo material relativo al tema. Fue revelador el libro de Hakim Bei, La  Zona Temporal Autónoma, que habla precisamente de este tipo de asentamientos improvisados fuera de la sociedad normativizada y realiza un estudio de connotaciones filosóficas y políticas muy interesante. 

- ¿Qué estética predomina?

- Eso es algo difícil de explicar. No me gusta la fotografía muy depurada, limpia. Me gustan las texturas, trabajar con los colores pero de una forma más primaria. Buscaba recrear un ambiente mágico y extraño que es lo que a mí me transmitía el lugar, y asimismo no dar nada por hecho en cuanto a la representación de las personas. Me inspiré en la película Stalker de Tarkovsky , en la fotografía de Bertien van Manen, Boris Mikhailov y sus procesos de pensamiento y sus fotografías, y los fotógrafos compañeros con los que trabajo como Lúa Ribeira que es mi hermana, Michael Alberry, Seba Bruno, e Isaac Blease.

- ¿Por qué le gusta hacer fotografías?

- No hay una sola razón. Creo que lo que más me ha atraído de la fotografía es su poder para congelar y atrapar el tiempo. Y la interacción con el mundo que conlleva, la foto no es la realidad sino una representación de la misma.

- ¿Qué es hacer fotografías para Ud?

 -Para mí, es mi trabajo. Y esto se lo copio al gran fotógrafo Harry Callahan que decía que ser fotógrafo no es nada excepcional, es como ser fontanera o carpintera, un oficio que requiere trabajo diario y amor.

- ¿Cuál es su formación?

 - Yo me licencié en  Ciencias Políticas en la universidad de una manera un tanto frustrada porque aunque es una materia que me apasionaba, el programa de estudios y las clases parecían estar anquilosadas en el pasado y mis inquietudes iban más hacia el periodismo y la investigación. Luego hice un posgrado de Fotoperiodismo en Barcelona y ahí encontré lo que me gustaba. Ahora me acabo de graduar en un curso de la universidad del Sur de Gales de Fotografía Documental.

- ¿Qué le parece la opinión expresada por el Jurado sobre su serie fotográfica?

- Me alegra que el trabajo haya gustado y es un honor ser seleccionada por un jurado formado por gente tan potente en el mundo de la fotografía. Este trabajo me supuso muchos conflictos internos a la hora de desarrollarlo porque no quería mostrar una visión unidireccional de lo que supone la vida en esta comunidad. Yo me fui a vivir allí realizando estancias periódicas y luego volvía a casa y revisaba el material y lo editaba. Me costaba mucho comprender qué estaba haciendo, qué quería contar y creo que aún no he llegado a ese punto incluso hoy.

- ¿Qué representa este premio en su carrera?

- El premio es un reconocimiento y para nosotros,  que trabajamos en soledad y a veces con dificultades para visibilizar nuestro trabajo, es una buena oportunidad. La dotación económica es un buen respaldo para continuar trabajando y la exposición estoy deseando verla y poder contribuir en el diseño y la preparación de las copias.

- Usted es gallega, ¿qué hace en Gales ahora?

- Yo me vine a Gales como tantos otros gallegos y españoles que hemos tenido que dejar nuestro entorno para poder desarrollar nuestro trabajo. Somos gente que no formamos parte de ninguna estadística pero somos muchos. Yo no estoy emigrada, estoy exiliada y esperando que las cosas mejoren para poder volver. Se está estrangulando a la cultura , el arte, la creación, la investigación, que son patrimonio de todos y cada uno de nosotros. No existe inversión pública y privada que fomente éstas, que son fuentes de riqueza pero no se ven así porque las élites políticas y empresariales son ignorantes, no representan a la mayoría de la población y son prepotentes. Se regodean en su poder pero sus días están contados.

- ¿Qué nuevos proyectos tiene entre manos?

- Ahora estoy trabajando con una comunidad de "banger boys" que son muy populares en el sur de Inglaterra. Organizan carreras de coches periódicamente y son coches que están para llevar al desguace. Los customizan con colores vistosos y mensajes y los destrozan corriendo y chocando en un circuito. Alrededor de esto hay toda una cultura y un movimiento relacionado con la clase trabajadora y con la actitud de la banda callejera que me está interesando mucho. Junto con este proyecto estoy retomando un trabajo que empecé el año pasado y del que hice un libro autoeditado sobre la zona del sur de Gales, donde vivo, relacionado con el post industrialismo. Esta es una zona castigada por el paro y cuyas industrias productivas han sido desmanteladas progresivamente desde los años ochenta. Algo similar a lo que nos está ocurriendo a nosotros, aunque aquí se está viviendo una fase del proceso más avanzada según mi punto de vista, ya que en Reino Unido el proceso de industrialización comenzó muchísimo antes, esta es la cuna de la Revolución Industrial. Es como ver un futuro no lejano. Para realizar este trabajo tengo el apoyo de una galería fotográfica galesa y estoy tramitando una beca de producción con una institución de apoyo a las artes del gobierno de Gales.

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