Los hoteles lanzan una avalancha de ofertas en búsqueda del turista nacional

Playa de Alicante. / Pixabay
Playa de Alicante. / Pixabay
Las grandes hoteleras, las de sol y playa, así como las urbanas, tienen dos denominadores comunes: la flexibilidad en la política de cancelación y una exigencia autoimpuesta de limpieza y desinfección para transmitir seguridad a los clientes.
Los hoteles lanzan una avalancha de ofertas en búsqueda del turista nacional

La pandemia del coronavirus en España ha golpeado severamente al turismo foráneo. Los hoteles en medio verano lanzan ofertas atractivas para capturar la atención del turista local e intentar salvar la temporada con sol y playa.

En ese sentido, de momento, una de las primeras medidas que han tomado las grandes cadenas fue reabrir solo una parte de sus hoteles, para intentar una reactivación del verano; sin embargo los rebrotes no les permiten avanzar.


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La mayoría juega de momento con grandes ofertas que van desde el 20% y en algunos casos hasta del 40% para atraer al viajero nacional y no quedarse a cero. Los descuentos se han convertido en la única alternativa, una vez que el plan de choque de reapertura escalonada de establecimientos ha sido insuficiente para equilibrar la oferta a la demanda actual.

En junio el balance fue de 80% menos de plazas hoteleras disponibles. Pese a ello, la ocupación fue solo del 18,8%, muy lejos del 65,7% de un año antes, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La ocupación ha ido al alza en julio y lo que va de agosto, aunque todavía no es momento de celebrar. Según patronales y principales hoteleras, ha escalado al 40%, cerca del 50% según los cálculos más optimistas. No obstante, esto es unos 30 puntos por debajo de la media marcada en ese periodo de 2019.

En algunos lugares la demanda es muy baja y tras las restricciones a los viajes por España de países como el Reino Unido, Alemania y Francia puede ser casi nula, lo que amenaza con hacer jaque mate a muchas compañías del sector.

Por ejemplo, en tres grandes referentes vacacionales el Meliá, Iberostar y Riu, este último es el que cuenta con ofertas más agresivas es Riu, con descuentos de hasta el 40% para reservas hasta octubre.  En Baleares admiten que sorteaban la situación con el turismo alemán, pero el viernes pasado con la inclusión de las islas entre las zonas de riesgo decretadas por Alemania se caldeó la situación.

El Meliá, otro de los grandes del sol y playa, tiene descuentos en su web de hasta el 30%. En sus tarifas incluye la cancelación gratuita, algo que se ha convertido en una cláusula obligatoria para todas las compañías para combatir la incertidumbre generada por el coronavirus y los rebrotes. Esta promoción, según explica la hotelera, se aplicará en las compras efectuadas en agosto y las reservas podrán ser hasta final de año.

Asimismo, el Iberostar tiene disponible en su portal una promoción con un descuento del 15%, el más modesto de los tres, y la estancia de niños sin coste adicional para atraer a las familias. Además, incluye la cancelación gratuita, como es habitual en la llamada nueva normalidad.

Todas las grandes hoteleras, las de sol y playa, así como las urbanas, tienen dos denominadores comunes: la flexibilidad en la política de cancelación y una exigencia autoimpuesta por las hoteleras de limpieza y desinfección para transmitir seguridad a los clientes. Un esfuerzo muy grande, con costes asociados en un año de pocos ingresos, pero que todas las empresas consideran capital para mantener algo de actividad.

En el segmento urbano, las firmas sufren tanto como las del litoral, sobre todo en las grandes urbes donde se han esfumado los turistas. En resumen, las promociones también se han hecho un hueco para contrarrestar el embate, aunque el éxito será relativo. Sin duda la lista de países con restricciones a los turistas que llegan desde España es demasiado larga y ha socavado la industria que genera más del 12% del PIB español. @mundiario

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