El artículo Miley Cyrus vuelve a burlar la censura de Instagram y lo muestra todo, se convirtió el pasado mes de marzo en lo más visto del medio. La artista estadounidense es especialista en sembrar la polémica y acaparar el foco de atención, no solo en redes sociales sino en la prensa de todo el mundo. Ahora, a las puertas de sacar un nuevo trabajo discográfico, su presencia mediática crece día a día. Sobre esto y otros aspectos pregunto a Andrés Piedrafita.
— Se viene hablando de un nuevo disco de Miley Cyrus desde el mes de noviembre del pasado año. Pero lo que más eco tiene desde hace un tiempo son sus instantaneas en Instagram. ¿Campaña pre-disco?
Pues Miley suele estar en boca de todos. Ya sea por una foto polémica, algún topless o un desnudo integral, siempre está dando de qué hablar. Por ello, no me extraña que su último posado de este tipo y en general, todo el revuelo que ha venido causando en las redes en los últimos meses, que no tiene otro fin distinto al de acaparar portadas, tenga relación con una campaña pre-disco. De Miley podemos esperar cualquier cosa y a estas alturas no debe sorprendernos.
— ¿Crees que la política de censura de desnudos que tiene Instagram discierne entre arte y pornografía? O quizá sea correcto censurar todo tipo de desnudos. ¿Qué opinas?
Es bien sabido que los desnudos son un género artístico, incluso desde la antigüedad. Ahora, llevarlo a las redes sociales, a la que tienen acceso millones de jóvenes -y hasta niños- alrededor del mundo, es cuestionable y de ahí las políticas de censura de cada una de ellas. En mi opinión, y creo que es algo que más bien queda constantemente en evidencia, la política de censura de Instagram es bastante deficiente y no discierne entre arte y pornografía. Ciertamente, cada celebridad tiene una personalidad y la plasma como quiera en sus redes sociales, pero no hay que olvidar que son una influencia y "modelos a seguir" para millones de jóvenes en el mundo. Atendiendo a esto último, considero que es correcto censurar, al menos, los desnudos más explícitos y sugerentes.
Es surrealista que mientras en otros países se debata sobre, por ejemplo, avances tecnológicos y otras cuestiones del primer mundo, en Venezuela el tema de discusión común de los ciudadanos sea si habrá agua o luz a lo largo del día.
— Como periodista venezolano que eres, es obligatorio que te pregunte por la situación que se vive en el país y que tú vives de primera mano.
No es un secreto que la realidad que vive Venezuela es apocalíptica. Aquí no hay colores. Tres apagones nacionales en un mes (marzo) se dice fácil; lo difícil es vivirlos en carne propia: negocios saqueados, pacientes muriendo en los hospitales, alimentos perdidos por falta de refrigeración, noches calurosas interminables... Es surrealista que mientras en otros países se debata sobre, por ejemplo, avances tecnológicos y otras cuestiones del primer mundo, en Venezuela el tema de discusión común de los ciudadanos sea si habrá agua o luz a lo largo del día. Increíble que se haya vuelto costumbre el que fallen estos servicios básicos: que sea una bendición que llegue el agua y un milagro pasar una noche con electricidad. Sin embargo, los venezolanos sabemos que el cambio llegará. Nos sobran los motivos para creer y luchar por nuestro país.
@opinionadas
