Aumentan a tres los muertos confirmados en un corrimiento de tierra en la isla italiana de Ischia
Esta isla vacacional famosa por sus aguas termales y su naturaleza volcánica, ha quedado completamente arrasada, con casas sepultadas por el barro y coches empujados hasta el mar.
El número de fallecidos tras el desprendimiento de tierra en la isla italiana de Ischia ha aumentado este domingo a tres, después de que los equipos de emergencia localizaran nuevas víctimas.
Se trata del cuerpo sin vida de una mujer, una anciana que aún está por identificar, al igual que el de una niñas de 5 ó 6 años, los cuales se unen al cadáver encontrado el sábado, el de Eleonora, de 31 años, quien vivía en el lugar del desastre con su novio, cuyo paradero se desconoce. De hecho, se siguen buscando a nueve desaparecidos, según han confirmado a EFE fuentes oficiales.
La isla de Ischia, frente al Golfo de Nápoles, registró la noche del viernes lluvias torrenciales que provocaron inundaciones y un violento corrimiento de tierra que arrastró todo a su paso en la zona del municipio de Casamicciola Terme, en su vertiente norte y que cuenta con 8.000 habitantes. Una parte de la montaña cedió y la corriente de barro del desprendimiento sepultó numerosas casas, destrozó edificios, arrastró rocas y arrancó árboles de raíz, además de que empujó coches hasta el mar.
Los cadáveres están siendo depositados en el tanatorio del hospital Rizzoli de la cercana localidad de Lacco Ameno, en Ischia, mientras los equipos de rescate buscan señales de vida en la Vía Celario de Casamicciola, el barrio a los pies de la montaña.
Estado de emergencia
El Gobierno de Italia ha declarado el estado de emergencia en la isla e invertirá 2 millones de euros en primeras medidas de auxilio y prevención, según anunció el ministro para la Protección Civil, Nello Musumeci, quien agregó que se realizará un estudio total de las numerosas zonas en riesgo hidrogeológico en todo el país.
Por otro lado, la oposición de centroizquierdas ha criticado el anuncio del ministro de Infraestructuras y vicepresidente, Mattero Salvini, pues en un primer momento declaró que habían fallecido ocho personas en la catástrofe cuando todavía no habían sido localizados. Por ello, Mattero Piantedosi, ministro del Interior de Italia, le rectificó y señaló que no se trataban de muertos, sino de desaparecidos.
Ante esta situación, los equipos de rescate están usando perros para rastrear señales de vida bajo los escombros, mientras un barco de la Guardia Costera busca en el mar, que se ha vuelto marrón, numerosos coches y autobuses que fueron arrastrados.
Los derrumbes y corrimientos se han vuelto algo usual en esta isla vacacional de naturaleza volcánica. A lo largo del último siglo se han contado en hasta 15 ocasiones, la última en 2009, cuando murió una niña y 20 personas resultaron heridas, también en Casamicciola Terme. @mundiario
