Antes de ser famosos: Michele Anne Mason, más conocida como Kendra Lust

Michele Anne Mason, actriz pornográfica.
Michele Anne Mason, actriz pornográfica.

Esta actriz pornográfica ingresó a la industria tras varios años reprimiendo su aventurada sexualidad y sus atributos. Es también una apasionada de los deportes.

Antes de ser famosos: Michele Anne Mason, más conocida como Kendra Lust

Antes de ser famosos es una serie exclusiva de MUNDIARIO en la que se estudia y conoce la vida de importantes celebridades antes de saltar a la fama. Por esta serie han pasado narcotraficantes, estrellas porno, bizarros artistas de Youtube, entre otros. Esta nueva entrega está dedicada a una de las estrellas porno emergentes ya consagradas: Kendra Lust.

Biografía

Michele Anne Mason nació el 18 de septiembre de 1978 en Madison Height, Michigan. Su familia tiene orígenes franco-canadiense e italiana.

Desde su infancia siempre fue una apasionada por los deportes. En la secundaria jugaba basketball y softball. Destacaba también por sus atributos físicos e incluso fue la reina del homecoming, una fiesta que organizan las escuelas estadounidenses para sus exalumnos.

Michele Anne Mason como reina del Homecoming.

Algo que tal vez nunca practicó pero que igualmente le apasiona es la lucha libre y en sus redes sociales es habitual ver publicaciones suyas acudiendo a estos eventos o apoyando a algún luchador en específico. Aparte de eso, es también fanática del ejercicio. De hecho, en sus redes sociales suele publicar más cosas de sus rutinas del gimnasio que de la profesión por la que todo mundo la conoce.

Michele Anne Mason en una foto de la secundaria.

Durante la adolescencia siempre fue una alumna bastante destacada, sobresaliendo siempre con los mejores promedios de su clase. No obstante, también tenía un lado bastante aventurero en cuanto a las relaciones, aunque lo mantuvo oculto durante años. En su penúltimo año de escuela, de hecho, tenía un novio que estaba en su año de graduación. El novio viajó para el Descanso de Primavera (Spring Break). Michele estaba celosa de no poder ir porque no tenía cómo pagar su viaje, por lo que fue a un club de strippers a pedir trabajo y con eso juntar plata suficiente para pagarse la expedición. Quién sabe cómo, convenció a los dueños del lugar de que la dejaran participar en un concurso de bailarinas aficionadas. Así, a sus 17 años ganó el concurso.

A los 18 años una plática con su mamá sobre su futuro la llevó a la conclusión de que quería viajar a California para perseguir una carrera como actriz. No obstante, a la hora de la verdad le temblaron las piernas y decidió entrar a la universidad, donde estudió enfermería. A día de hoy es una decisión de la que se alegra, pues ha dicho en entrevistas que si se hubiera enrolado en el cine o la pornografía a tan temprana edad no hubiera llegado demasiado lejos.

Como sea, mientras estudiaba en la universidad siguió trabajando como stripper para pagarse sus gastos. Michele disfrutaba la atención y el poder desenvolverse frente a una concurrencia. Obtuvo su licenciatura en enfermería y empezó a ejercer de inmediato.

Mason ejerciendo como enfermera

Sus 20 y sus 30 fueron bastante tranquilos. Se casó con un oficial de policía a quien conoció cuando ambos tenían ocho años de edad. Ambos tuvieron una hija.

Su entrada a la pornografía

Pese a no ser una vida de aventuras y riesgo, la vida de Michele transcurría en paz. Tenían él y su esposo un buen trabajo, una hija a quien amaban y ejercían en sus carreras. No obstante, de repente todo cambió.

Nunca ha dicho qué pasó exactamente pero algo sucedió que la obligó a buscar una forma de ganar más dinero. Michele hizo una lista de empleos con los que podría pues eso, generar un ingreso extra para su familia en tiempos de necesidad.

Su primera opción, no obstante, no fue la pornografía. Decidió dedicarse a los shows de cámara web en sitios para adultos en lugar incluso de volver a ser una bailarina nudista. Lo hizo apenas durante tres meses. En ese tiempo sus seguidores empezaron a preguntarle si consideraría grabar vídeos porno, algo que con el tiempo empezó a sonar cada vez más factible.

Tenía más de 30 años, una mente más madura y un físico con el que se sentía más a gusto. Con confianza en sí misma, y el hecho de que siempre le había gustado ver pornografía, decidió dar el paso. ¿Qué dijo su esposo? Pues según asegura ella, el tipo es nada menos que su mayor admirador. Hizo una sesión de fotos y las envió a las grandes compañías de la industria: Brazzers y Kink.com.

Brazzers respondió rápido a la propuesta y en 2012 la convocó a California para empezar a grabar escenas con ellos. A partir de ahí, su carrera se ha disparado pese a que durante seis meses ella misma admitía que no podía controlarse de los nervios y que solo intentaba hacer su trabajo como mejor podía. Adoptó de entrada el sobrenombre de Kendra Lust, el cual todavía le da un nombre a nivel prácticamente mundial.

Episodios anteriores:

 

Comentarios