Adiós, maestro Schommer, el autor de la serie Retratos psicológicos

Alberto Schommer y el fotógrafo gallego Xurxo Lobato, en A Coruña 2004. / Francisco Puñal Suárez
Alberto Schommer, a la derecha, y el fotógrafo gallego Xurxo Lobato, en A Coruña en 2004. / Francisco Puñal Suárez

En vida del Caudillo, éste llegó a prohibirle a sus ministros dejarse fotografiar por Schommer, a pesar de ser colaborador de 'ABC' y luego en democracia de 'El País'.

Adiós, maestro Schommer, el autor de la serie Retratos psicológicos

En vida del Caudillo, éste llegó a prohibirle a sus ministros dejarse fotografiar por Schommer, a pesar de ser colaborador de 'ABC' y luego en democracia de 'El País'.

Estuve en Madrid días pasados inaugurando dos exposiciones, una como autor y otra como comisario. Momentos de felicidad que se vieron truncados por la noticia de la muerte de Schommer

Habíamos coincidido trabajando para el libro Vigo Stella Maris editado por la World Fishing. Allí retrató a los personajes olívicos más singulares, Morris, Alfonso Paz Andrade, Corina Porro, Laxeiro, Julián Hernández…

Admiraba el trabajo de este fotógrafo, que me influenció en mi manera de hacer retratos. Su capacidad para hacer levitar a obispos, poner escudos a políticos y convertir en máscaras a personajes públicos era admirable. 

Alberto Schommer era un buen retratista porque conseguía epatar con el retratado. Construía las imágenes en bocetos mentales que luego llevaba a la realidad. Elaboración intelectual de las fotos. Una técnica perfecta. Vocación de estilo propio. 

Schommer, en el centro, rodeado por Steinberg, Luis Magán, Xurxo Lobato, Navia... / UIMP
Schommer, en el centro, rodeado por Steinberg, Luis Magán, Xurxo Lobato, Navia... / UIMP

 

Su serie Retratos psicológicos forma parte de la historia de la fotografía española. Fue una propuesta transgresora, en la transición, en vida del Caudillo, que llegó a prohibir a sus ministros dejarse fotografiar por Schommer, a pesar de ser colaborador de ABC y luego en democracia de El País.

Injustamente tratado por algunos gurús de la crítica fotográfica, no se le hizo el homenaje en vida que se merecía. 

El fallecimiento de su mujer hace pocos años le afectó definitivamente. La última vez que hablé con él me invitó a visitarlo y prepararle una exposición… Faltó tiempo.

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