11 artistas más acusan a Plácido Domingo de acoso sexual y suman ya 20

11 mujeres se han unido a las otras nueve que ya habían acusado a Plácido Domingo de acoso sexual hace unas semanas. De estas 11, tan solo una ha querido revelar su identidad: Angela Turner Wilson, cantante con quien Domingo trabajó en Estados Unidos. El tenor envió a un portavoz a asegurar que todo se trata de una campaña en su contra organizada por la agencia de noticias que ha difundido las acusaciones.

Este nuevo conjunto de supuestas víctimas decidió salir a confesar en respuesta a las explicaciones que el tenor español concedió tras la primera hilera de acusaciones el 13 de agosto recién pasado. De aquel primer séquito de mujeres igualmente solo una reveló su nombre: Patricia Wulf, una mezzosoprano ya retirada. Domingo defendió que los relatos de las mujeres eran "inexactos tal como se presentaban" y que consideraba que algunos comportamientos otrora aceptados, son hoy en día rechazados.

La información esparcida este jueves cuenta con testimonios de empleados que no fueron directamente acosados por Domingo, pero que sí dan fe del comportamiento de éste. Muchos laboran para la Ópera de Los Ángeles (LA Opera), en la que el tenor español es director general, y aseguran que su conducta era de sobra conocida en todas partes, incluso por los altos mandos de la institución. La Ópera misma ha decidido abrir una investigación interna a raíz de estas noticias.

Wilson fue compañera de escenario de Domingo durante la representación de la ópera Le Cid entre 1999 y 2000 en la Ópera de Washington. A la sazón tenía 28 años, 31 menos que Domingo. "Sabía que para mí era el comienzo de cosas grandes", explicó.

El acoso empezó una tarde antes de la primera presentación. Ambos estaban en el camerino maquillándose, cuando él se puso de pie y colocó sus manos en los hombros de ella. Acto seguido, metió sus manos bajo su ropa y las colocó en sus senos. "No fue suave. Me manoseó con fuerza", recuerda Wilson. Luego, sin más, Domingo se fue del lugar. 21 años después, Wilson trabaja como profesora de canto en Dallas, Texas.

La oncena de acusaciones incluyen tocamientos no consentidos, peticiones insistenes de citas a solas, llamadas nocturnas y hasta intentos de besarlas en la boca.

El tenor envió a Nancy Seltzer, su vocera, a defenderla. "La campaña continuada de AP para denigrar a Plácido Domingo no solo es equivocada sino también inmoral. Estas nuevas acusaciones están plagadas de inconsistencias y, como en la primera historia, son en muchos sentidos simplemente incorrectas”, proclamó. "Debido a la investigación en marcha, no vamos a comentar en detalle, pero rechazamos enérgicamente la imagen engañosa que AP está intentando dar del señor Domingo”, continuó.

Otra de las citadas es Melinda McLain, quien fue coordinadora de producción en la Ópera de Los Ángeles entre 1986 y 1987. Trabajó con el tenor español igualmente en la Houston Grand Opera. McLain asegura que siempre hizo todo lo posible por evitar que Domingo ensayara a solas con mujeres cantantes jóvenes, por más que él mismo lo solicitaba así. También intentaba de todas las formas que sus asistentes de vestuario fueran hombres.

“Montábamos estrategias elaboradas para mantenerlo alejado de ciertas cantantes”, explicó. "Yo nunca mandaba a ninguna mujer a su camerino", prosiguió. Otra de las formas de mantenerlo a raya era invitar a su esposa a las fiestas de la producción.

La agencia asegura que pudo hablar con varias personas que trabajaban en el departamento de vestuario de la Ópera de Los Ángeles y que todos confirman las acusaciones sobre su comportamiento pues incluso la institución estaba al tanto. Pese a que estos acontecimientos se remotan a años atrás, hay una empleada que asegura que el temor a su comportamiento sigue siendo tal y cual y que hasta 2017 se seguía evitando asignar mujeres a las pruebas con Domingo.

“Mi jefe directo me dijo que evitaban mandar ningún tipo de mujeres atractivas jóvenes a los preparativos con él debido a su comportamiento”, explicó un trabajador que se mantiene en el anonimato. Posteriormente prosigue explicando que el tenor era conocido por "acercarse demasiado, abrazar, besar, tocar y mostrar afecto físicamente”. @mundiario