Momento para el pimiento de Mougán, de paso por Guntín

pimiento mougan
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Es buen momento para acercarse a Guntín, que está a poco más de 20 km. de Lugo, y degustarlo en cualquiera de los restaurantes de este municipio por el que pasa el Camino Primitivo y la Vía XIX 
Momento para el pimiento de Mougán, de paso por Guntín

Son muchos los productos que identifican a un territorio. Es el caso del Pemento de Mougán en el municipio lucense de Guntín. Este pimiento tiene I.G.P. y fiesta en esta localidad el último fin de semana de agosto en la carballeira de Meixaboi, aunque la situación sanitaria impide la celebración tradicional y popular.

No obstante, apunta la revista HGgT es buen momento para acercarse a Guntín, que está a poco más de 20 km. de Lugo, y degustarlo en cualquiera de los restaurantes de este municipio por el que pasa el Camino Primitivo y la Vía XIX que unía Brácara con Lucus Augusti y que cruza por el romano Ponte Cabalar. 

Se trata de un pimiento de color verde, que al madurar se convierte en rojo, de mediano tamaño, algo más grande que el de Herbón. Una de sus características diferenciales con las de sus homólogos gallegos es que cuando nacen lo hacen hacia arriba, al contrario que los otros.

La zona geográfica tradicional de producción y elaboración del producto es la parroquia de Mougán y las limítrofes puesto que estas últimas poseen un clima, suelo y técnicas de cultivo muy semejantes. Recibe este nombre porque antiguamente se llevaban los pimientos en sacos y carros hasta la carretera de Mougán.

Una vez en Guntín, la visita casi obligada es al Monasterio de Santa María de Ferreira de Pallares, en el que llama la atención el claustro y el mausoleo de los Taboada. La fecha de su fundación se fija en el año 909 por los condes Don Ero y Doña Elvira, en base a referentes iconográficos escritos en la piedra. 


La cosecha se reduce al 50%

La cosecha de pimiento de Mougán será este este año más escasa que en años precedentes. El presidente de la IXP, José Luis López, calcula que la cantidad recogida será más o menos la mitad de la habitual.

López apunta a que el descenso de la producción se debe a circunstancias meteorológicas y subraya que en un año de cosecha normal pueden recogerse unas 14 toneladas en una superficie de media hectárea. En la campaña actual, con la recogida, más tardía de lo habitual, se quedará den unas siete toneladas. @mundiario

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