Granbazán con conserva de almejas o navajas de oro, harmonía atlántica

harmonía-granbazán2
El Granbazán Verde, un albariño para la exaltación. / HGgT
La almeja de oro en la Cata de conservas HGgT se deja envolver por la frescura del albariño, respetuosa, como una ola que la mece en feliz sucesión de sorbos y trasiegos.
Granbazán con conserva de almejas o navajas de oro, harmonía atlántica

Descorchamos uno de los vinos blancos triunfadores del verano, el Granbazán Etiqueta Verde, podio en el histórico concurso del Albariño de este año. Su botella estilizada (Rhin larga) guarda uno de los sellos de identidad de O Salnés, largo y prestigiado el recorrido de la bodega de Tremoedo, precioso pago de referencia en la D.O. Rías Baixas.


El Granbazán Verde 2020 llega a la nariz con su justa acidez, chispeante, intensos aromas primarios, a flores y cítricos como se autodefine sin mentir, seco y ligeramente salino. Le arrimamos primero una almeja, la de oro en la cata de mariscos en conserva de la revista HGgT, la de Mariscadora, cuyos mensajes marinos y sensual textura se deja envolver por la frescura del albariño, respetuosa , como una ola que la mece en feliz sucesión de sorbos y trasiegos. 

Probamos, por experimentar sensaciones, con la navaja de Luis Escurís Batalla, la primera del pódium en esta “caste molusca” en la Cata HGgT  y el Granbazán mantuvo su condición de director del baile,  el galán elegante, que se bastaría para cubrir con sus equilibrados dones toda la exhibición gastronómica.

Granbazán, la Etiqueta Ámbar, con berberechos

Porque no siempre las comparaciones son odiosas, ni mucho menos, sacamos a la pista la otra hermana del Granbazán, la Etiqueta Ámbar, por saber si ambas, pero por su orden, con el otro molusco al natural encumbrado en el oro, los berberechos de Nosa.

Pues sí, la Ámbar aporta su cuerpo elegante a los sápidos croques, la Granbazán Verde rubrica la salinidad atlántica de sus compañeros en degustación. @mundiario

Comentarios