El crecimiento económico del Sur de Asia se ralentiza a consecuencia de la guerra en Ucrania

Banco Mundial / Archivo
Banco Mundial / Archivo

Un documento del Banco Mundial tiene como objetivo presentar los impactos del conflicto bélico, los avances hacia una economía más verde y un análisis sobre la disparidad de género en la región.

El crecimiento económico del Sur de Asia se ralentiza a consecuencia de la guerra en Ucrania

Según el informe regional semestral del Banco Mundial, el crecimiento en el sur de Asia, que ya de por sí era desigual y frágil, será más lento de lo proyectado anteriormente debido a los impactos de la “operación militar especial” del presidente ruso, Vladímir Putin.

El documentado llamado “Reconstruyendo las normas: un nuevo proyecto de camino a seguir” y presentado este miércoles, estima que luego de la baja del 1% en comparación con la proyección de enero, la región del sur de Asia crecerá un 6,6% en 2022 y un 6,3% en 2023.

Estos países que ya se enfrentaban a una lucha con los precios de las materias primas y las vulnerabilidades en los sectores financieros, han visto  el aumento de estos desafíos, debido a la guerra en Ucrania, incrementando los déficits fiscales y deteriorando la economía.

Por su parte, Hartwig Schafer, vicepresidente del Banco Mundial para esta región, afirma que “el sur de Asia se ha enfrentado a múltiples conmociones en los últimos dos años, incluidos los efectos devastadores de la pandemia de COVID-19. Los altos precios del petróleo y los alimentos causados por la guerra en Ucrania tendrán un fuerte impacto negativo en los ingresos reales de las personas”.

Ante esto, explicó que los gobiernos deben “planificar cuidadosamente las políticas monetarias y fiscales para contrarrestar los impactos externos y proteger a los vulnerables, mientras sientan las bases para un crecimiento verde, resiliente e inclusivo”.

Crecimiento verde

Y es que, aunque el crecimiento del PIB es sólido, estos países se enfrentarán a desafíos futuros. India, Maldivas, Sri Lanka, Pakistán y Bangladesh, se encuentran vulnerables bien sea por presiones inflacionarias, inseguridad alimentaria o problemas energéticos. Pero no todo es desesperanzador, las exportaciones de servicios de la región van en aumento. Algo que puede proporcionar un impulso positivo para reducir la dependencia de importaciones de combustible, haciendo una transición al crecimiento verde.

El informe recomienda que los países se alejen de los subsidios a los combustibles ineficientes que tienden a beneficiar a los hogares más ricos y agotan los recursos públicos. Además plantean una introducción gradual de impuestos que impongan aranceles a los productos que causan daños ambientales.

Hecho que proporcionaría múltiples beneficios cuantificables, los cuales “podrían utilizarse para la adaptación contra los desastres relacionados con el clima y para fortalecer los sistemas de seguridad social”, expresó Hans Zimmer, economista jefe del Banco Mundial para la región.

A su vez, se incluye el desproporcionado impacto económico de la pandemia sobre las mujeres. Por lo que se recomiendan políticas y normas sociales que, en teoría, abordarán las acciones discriminatorias y mejorarán los resultados de género para un crecimiento inclusivo. @mundiario

Comentarios