Washington avisa de que Putin intervino también en elecciones europeas

La Casa Blanca.
La Casa Blanca.

Obama cree que el Kremlin ha orquestado y orquestará más ataques virtuales como los hechos al Partido Demócrata con intenciones de cargarse varios procesos electorales de Europa.

Washington avisa de que Putin intervino también en elecciones europeas

La potencia número uno del mundo está partida en dos a causa de su fuego diplomático con Rusia. A poco menos de dos semanas para que se haga la transición de Gobierno en Washington, ahora los servicios de inteligencia estadounidenses han advertido al mundo que desde Moscú se planean más ataques virtuales para interferir en elecciones en todo el planeta con la intención de favorecer al candidato más afín a sus intereses, como pasó cabalmente en Estados Unidos con Donald Trump. El empresario ha insistido en que la investigación no es verídica, ha dado muestras de que sus planes pasan por mejorar las relaciones con Rusia y encontrar un punto de colaboración mutua.

Trump tomará el relevo de Barack Obama el 20 de enero y las últimas semanas han sido una suerte de Guerra Fría Civil en la capital norteamericana. Desde que las oficinas de Inteligencia desvelaran que el Kremlin fue el encargado de los ataques virtuales durante las elecciones estadounidenses, ambos bandos -el de Trump y el de Obama- se han mantenido en un perenne fuego cruzado por medio de Twitter y entrevistas en medios de televisión, la versión moderna de la Guerra Fría del siglo pasado, con mensajes que se arrogan la verdadera verdad de los hechos.

La CIA, el FBI y la Agencia Nacional de Inteligencia no sólo creen ciegamente que Vladimir Putin, presidente de Rusia, tramó un plan para atacar directamente a Hillary Clinton y beneficiar el triunfo de Trump. De acuerdo a información desclasificada, Moscú "ha intentado influir en las elecciones a lo largo de Europa" y apuntará lecciones de la operación en estos procesos electorales -acusación que el despacho de Putin ha negado en repetidas ocasiones- para futuras ocasiones "en Estados Unidos y el mundo, incluidos aliados estadounidenses y sus procesos electorales".

Pese a que la primera vez que se acusó a Moscú de ser responsable de los ataques informáticos fue en octubre, las sanciones de la Administración de Obama y los informes de inteligencia se dieron tras los resultados finales de las elecciones ganadas por el empresario neoyorquino. Este último, que será presidente a partir del 20 de enero, asegura que su victoria ha sido limpia, honesta y sin necesidad de ningún hackeo, aunque últimamente ya no desmiente que no hayan habido.

Muestras de cariño con Putin

Todo este alboroto deja muy mal parado al actual residente de la Casa Blanca. Su proceder en este enredo ha sido muy criticiado incluso por miembros de su partido, el Demócrata, por considerarla no sólo tardía, sino débil. En una entrevista concedida a una cadena de televisión, Obama asegura que "los rusos intentaron entrometerse y se entrometieron" en las elecciones y hace un llamado al patriotismo de los políticos, a hacer a un lado los matices ideológicos, y unirse contra el verdadero rival: Vladimir Putin.

Del otro lado, Trump no cuenta con nadie. El neoyorquino nunca se ha inmutado en expresar su simpatía con Putin, un tema casi tabú en la política estadounidense por tratarse del nombre que más anticuerpos genera en Washington, y encima motivándole a robar información de la campaña de su gran amiga y rival del 8 de noviembre, Hillary Clinton. El día de ayer responsabilizó al Partido Demócrata por el robo digital de datos de sus servidores debido a su negligencia, en oposición a los del Partido Republicano, del que dijo que "mostraron una fuerte defensa".

Por medio de su Twitter, el futuro mandatario avisó que la relación Rusia es importante "sólo los estúpidos o los tontos lo ven como algo malo". "Ya hay bastantes problemas en el mundo, cuando sea presidente, Rusia nos respetará mucho más; ambos países, quizá trabajen juntos para resolver muchos grandes problemas en el mundo", publicó.

Las mismas oficinas de inteligencia siguen mostrando un tanto de recelo al momento de acusar a Rusia directamente del resultado. Los agentes han analizado con creces los complejos motivos que desencadenaron la victoria del magnate y, en los últimos días de campaña, el FBI abrió una investigación -otra vez- sobre el caso de los correos de los Clinton, algo en lo que Moscú no tuvo nada que ver.

Que el Kremlin haya podido robar y difundir correos privados de los cargos de sus principales partidos para intentar influir en la opinión pública en beneficio explícito de un candidato, sí agita las aguas en nortamérica, no sólo entre demócratas, sino también entre republicanos. El caso tiene alarmados a todos en Washington, menos al futuro presidente. @hmorales_gt

 

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