La violencia en México se centra de nuevo en los periodistas

Javier Valdez. / RR SS
Javier Valdez. / RR SS

El periodista Javier Valdez, uno de los mayores especialistas en narcotráfico, fue asesinado en Sinaloa y la subdirectora de un diario en Jalisco fue víctima de un atentado en el que murió su hijo.

La violencia en México se centra de nuevo en los periodistas

La violencia en México se centra de nuevo en los periodistas. Este lunes, el periodista Javier Valdez, uno de los mayores especialistas en narcotráfico, fue asesinado en Sinaloa y la subdirectora de un diario en Jalisco fue víctima de un atentado en el que murió su hijo. Además, en solo 48 horas un grupo de siete reporteros fue retenido en Guerrero por criminales.

México grita un “basta ya” a la violencia contra los periodistas y el gremio reclama que se ponga freno a la impunidad. Algunos medios decidieron parar.

"Los que te dispararon en la mañana –escribe Alejandro Almazán en El País, refiriéndose a Javier Valdez– son los mismos hijos de puta que llevan años asesinándonos como si fuéramos zancudos: policías, militares, funcionarios, narcos o políticos. Pura gente que a diario comete cobardías. Sabe qué número de homicidio es el tuyo, pero si ya antes había dolor, hoy duele más: es un pesar que se arrastra por el pecho como si fuera un gusano." Alejandro Almazán es un periodista mexicano, ganador del premio García Márquez y autor de varios libros sobre el crimen organizado en México como Cartas de La Laguna.

“Estamos en una crisis muy seria en cuanto al asesinato de periodistas en el país, no se trata de hechos al azar sino de ataques dirigidos a periodistas acreditados”, dijo Roberto Rock, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la Sociedad Interamericana de Prensa. Este periodista denunció que no existían registros tan altos de agresiones y atentados en contra de la prensa. La crisis está relacionada con las investigaciones realizadas a diferentes carteles del narcotráfico que operan en México. Los periodistas corren el riesgo de ser agredidos, e incluso asesinados, por dar información de los grupos criminales y de cómo operan.

Entre tanto, los feminicidios en el Estado de México ya superan a los de Ciudad Juárez, famosa por los cientos de casos de mujeres asesinadas en los años noventa.

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