Trump vuelve a burlarse de Obama y las acusaciones de espionaje a Rusia

Donald Trump recibió el 2017 como le gusta: con una mega fiesta en uno de sus lujosos resorts y atacando a Barack Obama y la CIA. El presidente electo de Estados Unidos ha vuelto a cargar contra el actual jefe de Estado por sus acusaciones a Rusia, a la que recrimina ataques cibernéticos durante las elecciones del año pasado, algo que ya en su momento había tildado de "ridículo" pese a que la información estaba respaldada por agencias de seguridad e inteligencia. El magnate dijo que contaba con información delicada sobre el tema, la cual hará pública durante la semana. El domingo, en tanto, 35 diplomáticos rusos abandonaron Estados Unidos como parte de las sanciones emitidas por Obama.

"Quiero que estén seguros de ello -de que Rusia orquestó una serie de ataques virtuales-, porque es una acusación bastante grave y quiero que estén seguros", aseguró el empresario. También recordó el "desastre" que causaron las falsas acusaciones de los servicios de inteligencia sobre las armas de destrucción masiva que supuestamente tenía Irak, mentira que sirvió como excusa para la invasión al país asiático. "Se equivocaron, así que quiero que estén seguros", remachó Trump.

"Sé mucho sobre pirateo informático. Es algo además que es muy difícil de probar, así que podrían ser otros" los responsables del pirateo digital, manifestó Trump, regresando a un argumento que ya usó en otras ocasiones para debatir las afirmaciones de las agencias de inteligencia de su país sobre Vladimir Putin, supuesto autor intelectual de los ataques.

Además, sé cosas que otra gente no conoce, así que no puede estar seguros de la situación", amenazó sin entrar en detalles. Cuando los periodistas le interrogaron sobre el significado de sus palabras, prefirió guardar silencio y asegurar que el mundo lo sabrá para el martes o miércoles.

El republicano ha hecho de menos en reiteradas ocasiones los informes que le han hecho al presidente las agencias de inteligencia, aun cuando él mismo los recibirá cuando llegue a la Casa Blanca. Según trascendió a mediados del mes pasado, Trump recibe un informe presidencial semanal. No obstante, luego de que Obama anunciara el jueves las sanciones contra Rusia por el susodicho caso –conllevaba entre otras cosas la expulsión de diplomáticos rusos y el cierre de dos residencias de descanso supuestamente sedes de actividades de espionaje–, Trump manifestó su deseo de reunirse cuanto antes con integrantes de la comunidad de espionaje para recibir de sus manos toda la información disponible respecto a este caso.

Éxodo de los diplomáticos rusos

Mientras, los diplomáticos rusos a los que Obama calificó de "non gratos" y expulsados por el mismo presidente, abandonaron el territorio estadounidense el domingo, día en que vencía el plazo de 72 horas que dio la Casa Blanca para su diáspora.

Moscú ha guardado total silencio respecto a estas sanciones, aunque lo harán en cuanto Trump tome el relevo de Washington.