Todos sobreactúan en el teatrillo presupuestario

Palacio de la Moncloa. / Archivo
Palacio de la Moncloa. / Archivo

La polvareda levantada en Madrid por los fuegos de artificio del proyecto presupuestario les permitirá por un tiempo ocultar la gravísima crisis interna que arrastran.

Todos sobreactúan en el teatrillo presupuestario

Es harto improbable que Sánchez logre sacar adelante su proyecto presupuestario. Tal vez ni siquiera llegue a superar el primer trámite, el de las enmiendas a la totalidad. Dada la actual aritmética parlamentaria, los números no le salen. Los independentistas catalanes, que tienen la sartén por el mango, no están por la labor, a pesar de que Cataluña vendría a ser la más beneficiada en los grandes números. Y el resto de los grupos que apoyaron la moción de censura no tienen intención de pringarse si no hay garantías plenas de que las cuentas vayan a pasar de las musas al teatro.

Aún así, sabiendo tirios y troyanos que estamos ante unos presupuestos meramente virtuales, se ha desatado una tormenta en forma de reproches al gobierno socialista por parte de las comunidades autónomas que más desfavorecidas salen en esa declaración de intenciones que por medio de un dispositivo de memoria digital acaba de entregar la ministra Montero a la presidenta del Congreso, la gallega Ana Pastor. En el caso de Galicia, hay una sobreactuación general. Sobreactúan casi hasta el ridículo tanto quienes descalifican sin más esos presupuestos, que son inmensa mayoría, como aquellos que, porque les va en el cargo, se esfuerzan en ver la botella medio llena.

La defensa que de las cuentas para Galicia hace Gonzalo Caballero tiene poco de rotunda. Partiendo de que todo documento presupuestario es mejorable durante su tramitación, el líder de los socialistas gallegos ve margen para incrementar las previsiones inversoras, que han caído un veinte por ciento respecto al año pasado. El "vocero" de Sánchez, Javier Losada, hace hincapié en que por su marcado contenido social, por anteponer las personas al cemento, los presupuestos de Sánchez son especialmente beneficiosos para nuestra comunidad. Ni el mismísimo presidente del Gobierno sería capaz de hacer una defensa más encendida de la propuesta presupuestaria de Don Pedro para este año. El exalcalde de A Coruña se está ganando el sueldo como principal propagandista y el gran apóstol del sanchismo en Galicia.

La de En Marea es, entre las críticas, es la postura más llamativa. Los diputados mareantes gallegos, siempre a la greña, por una vez se han puesto de acuerdo. Y se enfundan la camiseta nacionalista, marcando territorio. No votarán a favor de los presupuestos por el "aldraxe" que suponen a Galicia. Dicen que sus jefes en Podemos e Izquierda Unida saben que no van de farol. En cierto modo, con estas cuentas virtuales, ha venido Dios a verlos. La polvareda levantada en Madrid por los fuegos de artificio del proyecto presupuestario les permitirá por un tiempo ocultar allí y aquí, la gravísima crisis interna que arrastran y que, esa sí, es real. Y va a seguir estando ahí cuando se baje el telón del teatrillo. @mundiario

Comentarios