Temer se salva: El Tribunal Electoral brasileño absuelve al presidente de la destitución

Michel Temer libró su primera batalla ante la justicia. Con cuatro votos a favor y tres en contra, el presidente brasileño permanecerá en el poder. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Brasil absolvió este viernes al mandatario y a la expresidenta Dilma Rouseff, de la acusación levantada en su contra por supuestos financiamientos ilegales en la campaña electoral de 2014, que llevó al gobierno a ambos cuando aún eran aliados.

La sentencia fue dictada en medio de un histórico juicio que duró cuatro días. La decisión fue reñida. El juez instructor de la causa, Herman Benjamin, se mostró a favor de condenar a Temer y Rousseff, mientras que el presidente del Tribunal Electoral, Gilmar Mendes, quien nunca ha ocultado su amistad con el mandatario y otros tres jueces que fueron nombrados por él, defendían que no existían evidencias suficientes para anular la candidatura que triunfó en las urnas. Finalmente la mayoría se impuso. "Allá cada uno de los seis magistrados que me acompañan, pero yo como juez me niego a ser el enterrador de las pruebas objetivas", sentenció Benjamin en su voto el jueves por la noche.

Temer, por su parte, tras conocer la decisión de la corte electoral, afirmó este viernes que prevaleció la Justicia "de forma plena y absoluta". "Hubo un amplio debate y prevaleció la Justicia de forma plena y absoluta. El Judiciario se manifestó de modo independiente. Cada uno de nosotros acatará con sobriedad, humildad y respeto la decisión del TSE", señaló el portavoz de la Presidencia, Alexandre Parola, en un pronunciamiento en el Palacio de Planalto, sede del Gobierno.

"Como jefe del Ejecutivo, el presidente de la República seguirá, junto con el Congreso Nacional, honrando su compromiso de trabajar para que Brasil vuelva al camino del desarrollo y el crecimiento con más oportunidades para todos", concluyó el mandatario.

Esta sentencia aparece como un salvavidas al gobierno de Temer, quien ahora enfrentará ante la Corte Suprema, una causa abierta en su contra por los supuestos delitos de corrupción pasiva, obstrucción a la justicia y asociación ilícita.

Con 5 por ciento de aprobación popular en las encuestas y a pesar de todos los escándalos, Michel Temer busca mantenerse en el poder a toda costa. "El Gobierno llegará hasta el 31 de diciembre de 2018", proclamó esta misma semana.