Los técnicos de Hacienda piden abrir una investigación contra Manuel Moix
La oficina de Cristóbal Montoro da por buena una investigación contra el fiscal en jefe de Anticorrupción y sus hermanos por la sociedad que poseen en Panamá.
La Agencia Tributaria (AEAT) ha recibido este miércoles una solicitud para abrir una inspección fiscal sobre Manuel Moix, fiscal en jefe de la Fiscalía Anticorrupción. La inspección, emitida por los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), pesa también sobre los hermanos del fiscal y tiene la intención de verificar si la sociedad familiar Duchesse Financial Overseas, establecida en Panamá, no es más que una fachada para no pagar 90.000 euros en pagos de impuestos.
La sociedad, heredada por el fiscal y sus hermanos tras la muerte de su padre en 2011, posee un chalé en la localidad madrileña de Collado Villalba, por lo que la inspección tendrá que averiguar si existen indicios suficientes para levantar el velo societario a fin de que salgan a relucir los verdaderos y últimos propietarios de dicho inmueble, explican los técnicos.
Gestha señala que la aplicación a este caso de la Ley del Mercado de Valores determinaría que los Moix podrían haber eludido impuestos de forma deliberada al momento que adquirieron el control de la sociedad del país canalero. Cuando menos el 50% del activo de la empresa está formado por inmuebles en España, que a su vez no está ligado a actividades empresariales o profesionales.
Aparte, los técnicos piden a la AEAT que de a conocer de manera pública, y si las existieran, todas las irregularidades fiscales en la familia en materia y qué decisión se tomó al respecto tras la presentación de los modelos 720 de bienes y derechos en extranjero en 2013 y, explica eldiario.es, tras la puesta en marcha en el primer semestre del año pasado de una nueva herramienta informática para controlar patrimonios y rentas con la información de dicho modelo tributario.
Moix se queda aislado
La noticia se difundió rápidamente el martes y se sumó a los constantes escándalos y sonrojantes escándalos de la actual Administración española. El fiscal mismo dijo que no tenía por qué renunciar, defendiéndose en soledad de las acusaciones.
El Ejecutivo español le ha abandonado a su suerte y en La Moncloa nadie se atreve a dar la cara por él. Los ministros tiran la responsabilidad de un posible expediente en su contra al Fiscal General del Estado. La única que no lo hace es Dolores de Cospedal, pero porque ella prefiere guardar un silencio rotundo.
Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría no profundizan en el tema. El presidente fue preguntado el martes en Portugal si todavía confiaba en Moix y se limitó a dar un seco "sí". Sáenz, en cambio, dijo que el Gobierno no tiene jurisdicción en este tipo de temas.
